TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Son enormes estructuras que por muchos años han ayudado a conectar dos puntos, que son separados por ríos caudalosos en invierno.
Bajo estos puentes de varios metros de altura, que poco a poco han sido invadidos por personas de escasos recursos que no tuvieron otra opción.
Pero en la actualidad bajo varios puentes de la capital viven una gran cantidad de personas, que han construido casas improvisadas para convertirlas en sus hogares.
En otros sectores los vendedores ambulantes les ganan terreno a estos espacios y hay algunos que de forma improvisada tiene lugares que son casi una bodega, donde guardan mercadería.
Todas estas situaciones, además de poner en riesgo la vida de las personas que viven en malas condiciones, hace que la ciudad tenga un mal ornato.
Ante esto las autoridades de la Alcaldía Municipal, se han dado a la tarea de buscar soluciones a personas que están en alto riesgo de estas zonas.
Darwin Varela, gerente de Desarrollo Humano de la comuna capitalina, expresó que desde hace un tiempo se le está brindando ayuda a estas personas.
“Se han hecho varias intervenciones, apoyamos según el caso. Hemos brindado ayuda a adultos mayores y mujeres con muchos problemas, los hemos sacado de estos lugares y tratado con ayuda psiquiátrica, pero en muchos casos ellos vuelven”, explicó Varela.
Para atacar esta problemática se creó una mesa interinstitucional, donde se trabaja en conjuntos con varias dependencias para brindar ayuda.
Varela dijo que también a nivel de municipio se trabaja en realizar un censo para identificar a las personas que viven en estas zonas.
“Todo esto se hará con acompañamiento, ya que es muy complicado, hemos tratado de recopilar datos y las personas son renuentes” dijo el gerente de Desarrollo Humano de la Alcaldía capitalina.
Para Darío Castro, sociólogo y docente de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), ver tantas personas viviendo bajo puentes es consecuencia de la desigualdad.
“La pobreza está en todos lados, en los bordos de los ríos, bajo los puentes y la indigencia. En Tegucigalpa hay personas que viven en zonas que no llega el agua por gravedad y a esto se le suma la inseguridad. Esto no se puede resolver bajo las actuales leyes y el actual modelo económico, tiene que haber un planteamiento de una solución estratégica a largo plazo”, detalló Castro.
Una de las soluciones que propone el sociólogo es reubicar a estas personas en lugares seguros, donde puedan aprovechar las tierras para generar ingresos.
Para expertos en la construcción y urbanistas, estos problemas, además de poner en riesgo la vida de las personas, tienen consecuencias en el ornato de las urbes.
Consideran que no intervenir estos lugares -puentes- atrae más desorden, basura y que haya más riesgo de invasiones en los lugares cercanos, además de no invertir en los alrededores por el tema de la delincuencia común.
