Tegucigalpa,Honduras
En sus manos está la responsabilidad de hacer que los zapatos de limpios y pulcros varones mantengan su brillo y nitidez.
Son 33 hombres que integran la Asociación de Lustrabotas de Honduras (Asolush) quienes se han convertido en figuras insignes de la Plaza Central de Tegucigalpa.
Desde las 5:00 de la mañana, varios lustrabotas están listos para atender a sus primeros clientes que desean llegar con sus zapatos brillantes al trabajo.
Mañana 5 de agosto, la Asolush celebra su 42 aniversario de fundación. Ellos comenzaron con siete personas y hoy son 26 los que la conforman.
“Son 42 años de estar realizando una labor muy bonita y sacrificada. De este trabajo hemos logrado sacar adelante a nuestras familias y muchos jóvenes han podido realizar sus estudios universitarios”, relató Francisco Mairena, presidente de la Asolush.
Nítido compromiso
A diario los veteranos del “chaine” trabajan hasta 12 horas diarias para mantener a flote esta noble actividad. A pesar de que la clientela ha disminuido en un 60%, aún hay quienes hacen esta parada obligatoria.
“Es una trabajo muy agradable porque lo hago con mucho amor. Antes las personas hacían fila esperando su turno para lustrar sus zapatos”, recordó Juan Godoy, vocal número uno de la Asolush.
Unos 15 minutos se tarda el proceso de lustrado de un par de zapatos a un costo de 20 lempiras.
“Con este trabajo sobrevivimos todos cada días, luchamos por nuestras familias”, agregó Godoy.
Los lustradores exigen mayor seguridad y reparación del techo de su lugar de trabajo.
Las autoridades edilicias prometieron respetar y mantener su espacio con el remozo que experimentará el Parque Central dentro del plan maestro del centro histórico. “Nosotros como autoridades vamos a apoyarlos, ya que por muchas décadas han estado realizando este trabajo y son parte importante de la economía de la capital”, aseguró Juan Carlos García, primer regidor municipal.