TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Como seres capaces de sentir y expresar amor de manera incondicional y de aportar múltiples beneficios a la convivencia familiar, cada 21 de julio está dedicado a reconocer la importancia y el impacto positivo que estos fieles amigos tienen en la vida de sus dueños.
Desde tiempos antiguos, los perros han sido nuestros compañeros leales, ayudándonos en la caza, protegiendo nuestros hogares y, más recientemente, ofreciendo su amor y compañía en la vida cotidiana. Este vínculo único ha demostrado ser beneficioso de múltiples maneras.
Primero que todo, promueven la salud mental. La presencia de un perro suele reducir los niveles de estrés y ansiedad. Su afecto incondicional y su capacidad para detectar cambios en el estado de ánimo de sus dueños pueden proporcionar consuelo y apoyo emocional en momentos difíciles.
El aumento de la actividad física de su entorno es otro punto a favor. Los canes requieren ejercicio regular, lo que a su vez anima a sus dueños a mantenerse en movimiento. Pasear al perro es una excelente forma de incorporar el ejercicio diario, lo que contribuye a un estilo de vida más saludable.
Por otra parte, estos animales actúan como facilitadores sociales, ayudando a sus dueños a conocer a otras personas y a entablar nuevas amistades. Los parques, lugares pet friendly y los eventos comunitarios son excelentes oportunidades para interactuar con otros amantes de los perros.
Y recuerde que convivir con un can implica responsabilidad y compromiso. Esto es especialmente beneficioso para los niños, quienes aprenden sobre el cuidado de otro ser vivo y desarrollan un sentido de empatía y compasión.

La adopción sigue siendo oportunidad
El Día Mundial del Perro es también una oportunidad para promover la adopción y el cuidado responsable de estos animales. Miles de perritos en todo el mundo buscan un hogar amoroso. Aquí los puntos a considerar.
Retribución. Adoptar a un perro no solo salva una vida, sino que también enriquece la vida del adoptante con una lealtad y gratitud incomparables. Un perrito rescatado de las calles o que simplemente carece de un hogar, siempre lo llenará del amor que a él le ha hecho falta.
Responsabilidad. Hay que saber que tener un perro es un compromiso a largo plazo que requiere tiempo, recursos y dedicación. Los dueños deben asegurarse de proporcionar a sus mascotas una alimentación adecuada, atención veterinaria, ejercicio regular y, sobre todo, mucho amor.
Compatibilidad. Cada raza tiene características específicas en términos de energía, temperamento y necesidades de cuidado. Investigar y elegir una raza que se adapte a su estilo de vida y el de su familia es crucial para que el animalito se sienta bien.