Sexo y pareja

Niños rebeldes: ¿cómo cultivar la paciencia con los hijos?

Aprender cómo actuar cuando los niños desobedecen es una responsabilidad que debe asumir. Ser paciente y resolver conflictos de un modo pacífico es una posibilidad
08.08.2023

TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Aunque los niños tienen derecho a cuestionar su entorno y las órdenes que muchos adultos tratan de imponerles, es verdad que cuando desobedecen a sus padres reiteradamente y sin razón, la paciencia es una cualidad que se pone a prueba.

En ocasiones los hijos tienen comportamientos inadecuados debido a diversos motivos; están cansados, quieren llamar la atención, han tenido un mal día o no saben gestionar sus emociones. Pero es ahí cuando mamá y papá deben evitar caer en el desespero o la frustración.

Además de atender las causas de cada conducta inapropiada para poder aplicar las soluciones precisas, existen técnicas como las distracciones, el refuerzo positivo o la escucha asertiva, que se convierten en grandes alicientes para tratar con los pequeños.

Una buena idea es buscar un espacio tranquilo en el que pueda comunicarse con su niño para comentar qué ha pasado, por qué ha actuado así y cómo pueden buscar una solución juntos. Trate de ponerse en su lugar, de escucharlo y de entender qué lo ha llevado a actuar así.

Atienda cada caso desde una actitud de escucha activa sin cuestionarlo, posicionarse y entrar en la culpa o los castigos. El día de mañana él actuará de forma similar. En su lugar, es mejor emplear las consecuencias: “si golpeas las cosas se romperán y habrá que poner dinero para arreglarlas”.

Por otro lado, destaque la buena actitud. Si tiene ganas de gritar, algo que a todas y todos nos ha pasado más de una vez, puede hacerlo alejándose para que su hijo no se asuste, o bien puede contar hasta diez lentamente y abordarlo más tarde.

Lea con sus hijos sobre historias que hablen de la paciencia, de qué significa y cómo se trabaja. Será de mucha utilidad.

¿Los niños también son pacientes?

Para que sus hijos también sean pacientes y tolerantes, y se den cuenta que los conflictos se resuelven mejor mediante la calma, no dude en aplicar estos pequeños y efectivos trucos.

Gestión. Enséñeles técnicas de respiración para poner en práctica en esos momentos en los que se sientan estresados y agobiados. Respirar lento y profundo ayuda mucho.

Desahogo. Si su hijo grita o tiene un comportamiento que usted considera incorrecto, no le haga sentir culpable. En su lugar hable con él y dígale que es mejor que actúe desde la calma.

Refuerzo. Anote en un papel lo que le gusta de sus hijos y pídales que hagan lo mismo, que escriban lo que les gusta de su familia. Así se darán cuenta de las cosas buenas que tienen.

Entorno. Cree para sus hijos un clima familiar agradable y de apego seguro en el que puedan crecer felices y su autoestima sea sana y fuerte. Que sientan la libertad de expresarse.