Ciberbullying, un peligro real en la red

Tegucigalpa, Honduras.- La mayoría de nuestros hijos usan la tecnología de forma distinta a los adultos. Para ellos, los e-mails y voicemails son historias del ayer y se enfrascan en juegos grupales en línea y redes sociales, con un conocimiento del mundo digital que puede ser hasta intimidante para las generaciones adultas.

No obstante, usar la tecnología moderna, incluyendo el internet y redes sociales para acosar, amenazar, humillar o señalar a una persona es constituyente de Cyberbullying.

Es más común entre jóvenes. De hecho, el término se aplica casi invariablemente a acosos virtuales entre niños y adolescentes. Si las amenazas, humillaciones o acosos son perpetrados por un adulto mediante el uso de portales tecnológicos, el término que lo describe suele ser Cyberstalking o Cyberharassment, acto criminal con consecuencias legales y cárcel.

Ahora, los niños y adolescentes afectados por este tipo de acoso social y psicológico tienen a sentirse relegados y aislados, con daños en su autoestima. Depresión, ansiedad, estrés y hasta pensamientos y acciones suicidas son algunos de los horrendos efectos de este mal.

Cómo proteger a sus hijosCuando usted permita a su hijo comenzar a usar redes sociales o le regale su primer smartphone, hable con ellos de forma clara y realista sobre las consecuencias que trae el cyberbullying.

Eso podrá evitar que sean víctimas o perpetradores. Por otro lado, los investigadores señalan que la mayor parte del cyberbullying ocurre de noche.

Delimite parámetros razonables para que sus hijos apaguen y dejen en un lugar visible de su casa todo dispositivo electrónico. Para los más pequeños, use aplicaciones como Family Link para controlar absolutamente todo el uso que su hijo da a la tecnología y su vida virtual.

Nunca debe aceptar como amigos o seguidores en redes sociales a personas que no conocen en la vida real y exíjales que jamás compartan sus contraseñas con sus amigos.

También deben entender que postear un mensaje o subir una foto o video es un asunto delicado que no debe contener ofensas a otros o irrespetos a su privacidad y que toda interacción en redes sociales conlleva el riesgo de atraer comentarios negativos o no solicitados.

Todo niño o adolescente debe sentirse apoyado por sus padres y educadores. Reitere su apoyo y ayuda si alguien les acosa en línea para que lo comuniquen de inmediato a usted y a los maestros o si saben que alguien está siendo víctima de cyberbullying. Cultive en ellos confianza en sí mismos y en usted.

Enviar mensajes amenazantes y humillantes es mucho más fácil cuando se hace desde la mampara de una red social o dispositivo electrónico. Muchos de estos cobardes jamás dirían tales cosas cara a cara por temor a las represalias inmediatas o ver los negativos efectos de sus irresponsables acciones.

De hecho, la tecnología actual facilita todo tipo de actos dudosos en la privacidad y el anonimato falso o sensación de no castigo inmediato que proveen las plataformas virtuales. Enseñe a sus hijos a ser honestos, disciplinados, con fuerza de voluntad y sinceros. Sea usted mismo su mejor ejemplo.

El cyberbullying no es diversión ni algo “cool”. Es un problema serio que daña tanto a la víctima como al perpetrador. Fortalezca su relación con sus hijos y hágales sentir amados y protegidos. Establezca límites claros y prácticos así como protocolos de acción a tomar en caso de que sean víctimas de acoso virtual.

-Esparcir rumores dañinos por redes sociales o portales en línea.

-Acosar y acechar a alguien en línea.

-Excluir a personas de eventos sociales en línea.

-Postear o enviar mensajes con amenazas, insultos y colgar públicamente videos o fotografías humillantes o memes humillantes.

-Orquestar el acoso y vilipendio mediante el uso de cuentas falsas en redes sociales.

-Develar, reenviar o compartir información personal o privada de las víctimas en portales tecnológicos de forma pública.

-Acoso en juegos en línea o de realidad virtual.