El astro argentino Lionel Messi declaró este jueves en su juicio en Barcelona que él se dedicaba a su carrera deportiva y desconocía el entramado societario por el que presuntamente defraudó 4,16 millones de euros al fisco español.
Cientos de periodistas y unos cuantos curiosos acudieron al tribunal para ver al jugador a su llegada a la sala. Las autoridades habían preparado un dispositivo especial para controlar a las masas y proteger al futbolista. Algunas personas mostraron su apoyo al astro argentino, mientras que otros pocos gritaron en su contra, le instaron a 'devolver el dinero' y le dijeron que se fuera a jugar 'en Panamá'.
'Yo me dedicaba a jugar al fútbol, confiaba en mi papá y en mis abogados y no tenía ni idea de nada', afirmó el futbolista del FC Barcelona, reafirmándose en la línea de defensa utilizada desde el comienzo de la investigación en 2013.
Messi y su padre Jorge Horacio están acusados de haber defraudado 4,16 millones de euros al fisco español entre 2007 y 2009 utilizando un entramado de sociedades en Reino Unido, Suiza, Belice y Uruguay para ingresar los derechos de imagen del futbolista evitando el pago de impuestos.
Durante estos años, Messi firmó contratos de patrocinio con marcas como Adidas, Konami, Pepsi o Danone a nombre de una sociedad en Uruguay, Jenbril, propiedad suya al 100% y a la que había cedido la gestión de sus derechos. Él dijo desconocer todo eso.
'Lo único que sabía es que firmábamos acuerdos con determinados patrocinadores, por una cantidad equis de dinero y yo tenía que hacer anuncios, fotos y cosas de esas pero sobre el dinero y dónde iba no sabía nada de eso', aseveró el futbolista.
Según él, el entramado de sociedades fue orquestrado por un despacho de abogados barcelonés que les asesoraba en materia fiscal y que mantenía contacto únicamente con su padre. 'Yo confiaba en él y los abogados nos decían que lo hiciéramos de esa manera', recalcó.
La fiscalía aceptó esta versión y ya desde antes del juicio retiró la acusación contra Messi.
Pero la abogacía del Estado, representante de Hacienda, cuyas preguntas Messi no quiso responder, mantuvo la acusación reclamando 22 meses y medio de prisión y una multa equivalente a la cantidad defraudada.
Mira el momento que Messi recibe fuerte insulto: