PORTO ALEGRE, BRASIL.- Con el cartel de protagonista menos esperado de los cuartos de final de la
Copa América,
Paraguay llega a Porto Alegre a jugar ante
Brasil con escasas armas futbolísticas que le permitan soñar con dar el gran golpe ante un anfitrión hambriento de gloria.
Un desteñido empate 1-1 entre japoneses y ecuatorianos, en el cierre del Grupo C, logró el milagro para los guaraníes que cómo adelantó Eduardo Berizzo podrán jugar 'una nueva Copa'.
Los dirigidos por el Toto Berizzo fueron de mayor a menor en el torneo. Desperdiciaron una ventaja de dos goles ante Catar para terminar firmando un 2-2, volvieron a empatar con Argentina (1-1) y cayeron ante Colombia por la mínima diferencia.
Más allá de los resultados, las preocupaciones de los paraguayos pasan por la debilidad mostrada por el equipo para sostener el resultado y la falta de creatividad para generar fútbol para sus delanteros.
Derlis González se ganó un lugar en el equipo, tras arrancar el torneo en el banco, y tuvo chispazos de buen fútbol que dan esperanzas al entrenador.
'Paraguay tiene equipo y fútbol para seguir en el torno', soltó con optimismo el DT argentino tras caer ante los cafeteros.
El gigante Brasil será la muralla a atravesar por los guaraníes el jueves en el estadio Arena do Gremio de Porto Alegre.
- ¿Equipo blando? -
Fuera del equipo, el veterano goleador guaraní Roque Santa Cruz pidió paciencia a la afición para que Berizzo desarrolle su trabajo con tranquilidad y encare las clasificatorias sudamericanas, con la misión de devolver a los guraníes a la Copa del Mundo en Catar-2022.
'Como equipo tenemos cosas que mejorar (...) pero es un plantel que es muy rico, esperemos que próximamente puedan encontrarse más a gusto jugando juntos', señaló el goleador histórico de la Albirroja en entrevista con radio Monumental de Paraguay.
En funcionamiento, por momentos, 'somos un poco blandos o con mucha tendencia a ser superados por el adversario en lo físico', aseveró el atacante de Olimpia.
El equipo tiene que pulir su juego para 'suplir esa carencia o esa debilidad con otros aspectos que se pueden explotar mejor', agregó Santa Cruz.
Para frenar a Everton, Fhilippe Coutinho y toda la banda del ataque de la Canarinha, Paraguay va a necesitar que buscar una nueva marcha en el medio y recordar la garra que en décadas pasadas lo convirtió en la defensa más dura de la Sudamérica.
Temperamento, marca férrea y apuesta al juego aéreo para suplir fallas en la generación de fútbol han sido la receta histórica del fútbol guaraní, una fórmula que cayó en desgracia en los últimos años relegando al combinado de la élite del fútbol latinoamericano.
En casa del pentacampeón Brasil, lanzado en busca de su novena Copa América, es la hora de buscar renacer.
Aunque soñar con una victoria parece demasiado, plantear un juego aguerrido y disputado a los hombres de Tité sería suficiente para presentar credenciales de regreso a la circulo de honor de la región.
Un desteñido empate 1-1 entre japoneses y ecuatorianos, en el cierre del Grupo C, logró el milagro para los guaraníes que cómo adelantó Eduardo Berizzo podrán jugar 'una nueva Copa'.
Los dirigidos por el Toto Berizzo fueron de mayor a menor en el torneo. Desperdiciaron una ventaja de dos goles ante Catar para terminar firmando un 2-2, volvieron a empatar con Argentina (1-1) y cayeron ante Colombia por la mínima diferencia.
Más allá de los resultados, las preocupaciones de los paraguayos pasan por la debilidad mostrada por el equipo para sostener el resultado y la falta de creatividad para generar fútbol para sus delanteros.
Derlis González se ganó un lugar en el equipo, tras arrancar el torneo en el banco, y tuvo chispazos de buen fútbol que dan esperanzas al entrenador.
'Paraguay tiene equipo y fútbol para seguir en el torno', soltó con optimismo el DT argentino tras caer ante los cafeteros.
El gigante Brasil será la muralla a atravesar por los guaraníes el jueves en el estadio Arena do Gremio de Porto Alegre.
- ¿Equipo blando? -
Fuera del equipo, el veterano goleador guaraní Roque Santa Cruz pidió paciencia a la afición para que Berizzo desarrolle su trabajo con tranquilidad y encare las clasificatorias sudamericanas, con la misión de devolver a los guraníes a la Copa del Mundo en Catar-2022.
'Como equipo tenemos cosas que mejorar (...) pero es un plantel que es muy rico, esperemos que próximamente puedan encontrarse más a gusto jugando juntos', señaló el goleador histórico de la Albirroja en entrevista con radio Monumental de Paraguay.
En funcionamiento, por momentos, 'somos un poco blandos o con mucha tendencia a ser superados por el adversario en lo físico', aseveró el atacante de Olimpia.
El equipo tiene que pulir su juego para 'suplir esa carencia o esa debilidad con otros aspectos que se pueden explotar mejor', agregó Santa Cruz.
Para frenar a Everton, Fhilippe Coutinho y toda la banda del ataque de la Canarinha, Paraguay va a necesitar que buscar una nueva marcha en el medio y recordar la garra que en décadas pasadas lo convirtió en la defensa más dura de la Sudamérica.
Temperamento, marca férrea y apuesta al juego aéreo para suplir fallas en la generación de fútbol han sido la receta histórica del fútbol guaraní, una fórmula que cayó en desgracia en los últimos años relegando al combinado de la élite del fútbol latinoamericano.
En casa del pentacampeón Brasil, lanzado en busca de su novena Copa América, es la hora de buscar renacer.
Aunque soñar con una victoria parece demasiado, plantear un juego aguerrido y disputado a los hombres de Tité sería suficiente para presentar credenciales de regreso a la circulo de honor de la región.
