Tegucigalpa, Honduras
Las remesas familiares que alivian la economía hondureña registrarán un leve crecimiento de 2%, proyectan las autoridades del Banco Central de Honduras (BCH) en su Programa Monetario 2017/2018.
La meta fue revisada a la baja, ya que a inicios del año habían anunciado un aumento anual de 5%, hasta los 4,150 millones.
El ajuste obedece a la incertidumbre que generan las políticas migratorias anunciadas por el nuevo gobierno de Estados Unidos, de donde proceden el 90% de las remesas.
El nerviosismo por la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca disparó el envío de remesas al país, ya que en los primeros dos meses de este año el aumento ha sido de 10% en comparación con 2016.
No obstante, se prevé que en los próximos meses disminuyan las transferencias.
Las cifras
Durante 2016, las remesas familiares sumaron 3,974 millones de dólares y para el cierre de este año alcanzarán los 4,051 millones, 77 millones más.
Los hogares hondureños reciben 330 millones de dólares (unos 7,700 millones de lempiras) en promedio al mes. El 80% de este dinero se destina a vestuario y alimentación.
Esto convierte a Honduras en un país dependiente de las remesas, ya que representan cerca de 20% del Producto Interno Bruto (PIB) del país.
El reto de los gobiernos es crear condiciones para atraer inversión y que se generen oportunidades de empleo.