Semana Morazánica: ¿Dónde hacer turismo de montaña en Honduras?

TEGUCIGALPA, HONDURAS. Sin importar donde vivan dentro del territorio nacional, los hondureños tienen el privilegio de poder disfrutar de una naturaleza impresionante y exquisita en biodiversidad, durante este período de la Semana Morazánica.

Ante el asedio de las altas temperaturas, en el centro del país, en el departamento de La Paz, la reserva de El Jilguero - con una extensión de 44,108.01 hectáreas, que abarcan nueve municipios- les ofrece bosques nublados, donde los visitantes pueden realizar senderismo, acampar, avistamiento de todo tipo de fauna, y disfrutar también del variado canto de aves, además de bañarse en las diferentes cascadas o refrescarse en los arroyos de aguas cristalinas y de color esmeralda.

Para llegar a esta área protegida, de la ciudad de La Paz se viaja unos 31 kilómetros hasta San Pedro de Tutule, de ahí puede iniciarse una aventura por las primeras 2,727.63 hectáreas de reserva correspondientes a este municipio, luego por las 1,085.6 hectáreas de Santa María; las 888.10 de San José; las 4,378.44 de Chinacla; las 3,916.21 de Marcala y las 597.23 de Cabañas.

Lo más espeso de la reserva del Jilguero- una de las mayores zonas productoras de agua de el país- se encuentra entre Santa Ana que posee un área de 10,161.24 hectáreas y Opatoro que concentra 20,138.22 hectáreas con una conservación impresionante.

Denis Ramón Donaire, especialista ambiental y encargado del área protegida por parte de la Asociación para el Manejo Integrado de Cuencas de La Paz y Comayagua, explicó que esta reserva tiene una gran cantidad de atractivos, según el interés del turista que prefiere la naturaleza. Para atender a los visitantes hay dos clubes de avistamiento de aves, el club jilguero y el club aves de la sierra lenca con ellos se pueden coordinar giras, aseguró.

Aparte de la Reserva del Jilguero, en el centro del país también están el Parque Nacional Cerro Azul Meambar (Panacam) cuya área de 312 kilómetros cuadrados distribuidos entre el municipio de Siguatepeque, Comayagua y Santa Cruz de Yojoa, Cortés.

Marlon Javier Pineda, alcalde de Santa Cruz de Yojoa, sostuvo que la gente y la belleza natural de este municipio espera la visita de los turistas durante esta Semana Morazánica, para lo cual ya están muy preparados.

Como atractivo del Panacam, destacó un parque muy bien cuidado por el Proyecto Aldea Global (PAG) que actualmente tiene el manejo, autorizado por parte de las municipalidades y el Congreso Nacional.

Es una reserva que en los últimos años su área de conservación se ha ido ampliando. “Aquí los turistas pueden disfrutar de la tranquilidad, de un aire puro. Se puede visitar en familia, pueden ir a pernoctar, realizar el recorrido del sendero que durar unas siete horas, y contemplar aves animales. Verán mucha flora, incluso hay una cascada cerca de donde está el hotel, a unos diez minutos más o menos”, destacó el edil.

Pineda explicó que la entrada al parque es por el desvío de La Guama, luego llega a la comunidad de Santa Elena y más adelante, unos diez kilómetros de carretera, en buen estado, está el hotel Panacam.

A llegar los visitantes encontrarán a su disposición guías turísticos para su acompañamiento a realizar los recorridos. “Aquí los turistas podrán tener la oportunidad de ver el colibrí esmeralda, que es muy rato encontrarlo en otros sitios del país”, promovió Pineda.

Según el alcalde, aparte del Panacam, en Santa Cruz de Yojoa también está lo que la gente le llama el sendero del Diablo, en la comunidad de El Ocotal a inmediaciones de la represa hidroeléctrica de El Cajón (Francisco Morazán).

Este también es un área protegida con mucho bosque y fauna. Desde la parte alta se puede ver todo lo que es el espejo de agua de la represa hidroeléctrica. Estos bosques son administrados por los patronatos y los comités de fuentes de agua, por lo que también se mantiene bien conservado, detalló Pineda.

Entre su riqueza verde, Honduras actualmente posee 91 áreas protegidas clasificadas en distintas categorías, como refugios de vida silvestre, parques nacionales, zonas productoras de agua, monumentos naturales, monumentos culturales, reservas biológicas, reservas forestales, zonas de reserva ecológica y sitios Ramsar (relacionados a humedales).

Según la legislación vinculada a la protección ambiental, un área protegida se define como las extensiones “donde se puede asegurar la preservación de los ambientes naturales y sus componentes. Son áreas de regular extensión con características sobresalientes: ecosistemas, especies de flora y fauna, recursos naturales, históricos y culturales, y bellezas escénicas, entre otras”.

En 1992, mediante la Ley General del Ambiente, se creó bajo el decreto número 104-93 el Sistema Nacional de Áreas Protegidas de Honduras (Sinaph) con el propósito de facilitar la conservación y protección de los recursos naturales del país.

Después de 31 años en funcionamiento, gracias a este sistema la flora y fauna nacional tiene una buena conservación que los hondureños pueden disfrutar en sus tiempos libres.

Van desde bosques muy secos tropicales, secos y húmedos subtropicales, cada uno con una fascinante biodiversidad y generadores de agua para mover hidroeléctricas, impulsar riegos y cultivos, así como para el consumo humano.

Por todo el país hay exquisitos sitios naturales accesibles a los turistas. En el centro también está el Parque Nacional montaña de Yoro, la Reserva Biológica de Montecillos compartida entre los departamentos de Comayagua, La Paz e Intibucá; En Francisco Morazán, está la Reserva biológica de El Chile y el Parque Nacional La Tigra.

En la zona norte destaca el Parque Nacional Cusuco, en el municipio de San Pedro Sula, y el Parque Nacional Pico Bonito en La Ceiba. Entre los municipios de El Porvenir, San Francisco, La Másica y Esparta, Atlántida, queda el refugio de vida silvestre Cuero y Salado. En la misma ruta se encuentra el Jardín Botánico de Lancetilla, en Tela.

En la zona occidental, los hondureños también pueden disfrutar de toda la belleza que les ofrece el Parque Nacional Celaque. Para este feriado morazánico, la oferta de la naturaleza está disponible dentro de todo el territorio hondureño.

Reizel Vilorio, viceministra de turismo invitamos a los hondureños a realizar turismo interno y conocer aquellos rincones que poseen una variada oferta de sol y playa y de montaña, “pues Honduras tiene una diversidad que ofrecer en atractivos, gastronomía, culturas vivas y apoyar a los emprendedores con sus distintos productos típicos de cada región”.

Para los que les gusta la naturaleza pueden visitar parques importantes como Pico Bonito, Cusuco, Celaque, La Tigra, Cerro Azul Meámbar donde disfrutarán hacer aviturismo, senderismo y contemplar unos hermosos paisajes.

“Esperamos en este feriado que 1.5 millones de hondureños se movilicen a nivel nacional y les invito a llenarse su corazón de Honduras con toda su familia y amigos”, invitó la viceministra.

Este país tiene una riqueza natural y cultural única desde playas, cascadas, parques arqueológicos, parques nacionales y refugios que merecen conocer.