Era la primera vez, al menos públicamente, que expertos en estadística electoral sostenían que el voto de las zonas rurales sería determinante para inclinar la balanza.
Concretamente se tejió este relato: el candidato Salvador Nasralla (de la alianza opositora) llevaba una ventaja de casi cinco puntos porcentuales frente al oficialista Juan Orlando Hernández, en el primer recuento, con el 57% de las mesas escrutadas.
LEA: Diversidad de fuerzas y alianza por intereses serán parte del nuevo Congreso Nacional
Tras ello, la brecha se fue reduciendo poco a poco hasta que Hernández superó a Nasralla y fue declarado como ganador.
El Partido Nacional atribuyó este cambio de tendencia al conteo del voto rural, que supuestamente apoya al nacionalismo y tarda en sumarse a los resultados preliminares por falta de internet y electricidad, mientras que la oposición acusó que se debió a un fraude electoral.
A pesar de ese papel, es poco lo que se ha estudiado sobre un hipotético voto rural en Honduras.
ADEMÁS: Novedades de la jornada cívica mandan luz de paz a partidos políticos
¿Hay voto rural?
El voto rural tiene peso en otros países, puede elegir un presidente. Nótese que los condados rurales le dieron la victoria al expresidente Donald Trump en 2016 por encima de las ciudades megapobladas en Estados Unidos.O el caso de Evo Morales en Bolivia: por ser un dirigente indígena y campesino tuvo mucho apoyo de estos sectores en sus diferentes campañas presidenciables.
Pero hay factores diferentes con Honduras. En Estados Unidos funciona un sistema de votación indirecta por estados y delegados, lo que otorga un peso a aquellas zonas rurales para equilibrarse con las áreas urbanas.
Además, a diferencia de Bolivia, no hay un líder político de peso que emerja de las entrañas del interior del país.
Lo más importante: ¿qué es un municipio rural?
La Unidad de Datos de EL HERALDO se dedicó a estudiar si hubo alguna correlación entre el apoyo al Partido Nacional y los municipios rurales.Para ello, se tomó como punto de partida el índice de desarrollo municipal elaborado en 2015, que mide las necesidades básicas insatisfechas, índice de desarrollo humano, urbanización y autonomía financiera, entre otros. Se cruzó con el porcentaje de apoyo al Partido Nacional en el nivel presidencial.
A priori, sí se muestra una tendencia clara que a menor desarrollo municipal, mayor apoyo al instituto de la estrella solitaria, tal y como aparece en la infografía de la nota.
+: Sin 'discursos de odio y desprestigio': Naciones Unidas aboga por elecciones con respeto y tolerancia
El caso extremo es Valladolid (Lempira), con uno de los índices más bajos, con 33.3 por ciento, y donde Juan Orlando Hernández obtuvo el 79.4 por ciento de los votos en el proceso electoral de hace cuatro años atrás.
En contraste sobresale El Progreso (Yoro), donde la alianza de oposición apenas alcanzó el 25.6% de los votos. Este municipio tiene un índice de 89.21.
El fenómeno que se lee es, que poco a poco, los pequeños municipios rurales ayudaron a sumar votos al nacionalismo.
Pero el análisis también muestra un voto georreferenciado: mientras el norte de Honduras parece inclinarse por la alianza entre Libre-Nasralla-Pinu, en los departamentos de occidente el PN se muestra fuerte y sólido.
Cuatro años después, todos los políticos vuelven a interesarse en la zona rural.
ES DE INTERÉS: 'Yani Rosenthal tiene un acuerdo con Juan Orlando Hernández'
