Los mineros, con batea en mano, tratan de exprimir de entre las aguas de la quebrada San Juan Arriba los restos de oro.
Con las manos muelen los grumos de tierra en busca del mineral precioso con el fin de agenciarse unos cuantos lempiras.
Encontrar un gramo de oro representa una felicidad para los mineros que en la actualidad buscan entre las corrientes de la quebrada San Juan Arriba, El Corpus.
Las amas de casa también se incorporan a las faenas.
Las amas de casa también se incorporan a las faenas.
Las amas de casa también se incorporan a las faenas.
Con suerte los sacadores de oro de las aguas de la quebrada San Juan Arriba logran obtener unos 150 lempiras al día.
Con suerte los sacadores de oro de las aguas de la quebrada San Juan Arriba logran obtener unos 150 lempiras al día.
