Tegucigalpa, Honduras.- Con las fiestas de fin de año a la vuelta de la esquina, los padres deben estar más atentos que nunca al cuidado de sus hijos.
La Fundación para el Niño Quemado (Fundaniquem) reporta, a solo pocos días de finalizar el año, el ingreso de 18 menores quemados por diferentes causas.
Sin embargo, los cupos en la fundación se están agotando, y actualmente solo quedan cinco espacios disponibles para atender a más niños.
Alfredo Díaz, portavoz de la fundación, alertó que el 92% de los menores ingresados han sufrido quemaduras por líquidos calientes, lo que sugiere que los padres no solo deben estar atentos a los peligros de la pólvora, sino también a los alimentos y otros elementos que puedan representar riesgo para los pequeños.
Díaz explicó que la sala de la fundación tiene capacidad para atender a un máximo de 23 niños, por lo que hizo un llamado a los padres para que mantengan una vigilancia, especialmente con la llegada de los días festivos.
El portavoz también reveló que tres menores han regresado a sus hogares para continuar con el tratamiento ambulatorio de sus quemaduras.
Curiosamente, mencionó que la mayoría de los accidentes están relacionados con la cocción de nacatamales, un platillo tradicional de la temporada.
Las edades de los menores afectados oscilan entre los 0 y 10 años, y los departamentos con mayor número de ingresos han sido Francisco Morazán, Comayagua y Olancho.
“Es una emergencia por los líquidos calientes. El año pasado, la situación fue diferente, ya que predominaban los casos por pólvora”, informó Díaz.