Tegucigalpa, Honduras
Sus exigencias siguen en pie. Los estudiantes de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) se volvieron a apoderar ayer del campus universitario y una vez más se suspendieron las clases.
Pese a que la UNAH decidió posponer la aplicación del 70% como índice para aprobar sus clases, los alumnos no dan marcha atrás en su demanda de que las normas académicas sean derogadas.
Ayer todos los edificios de la ciudad universitaria fueron tomados por los integrantes del Movimiento Amplio Universitario (MAU), como medida de presión.
Luego de una multitudinaria marcha a lo interno del campus, los muchachos se dirigieron a los bajos del nuevo edificio administrativo para reclamar por la mejora en la infraestructura de las aulas y laboratorios.
Como parte de la manifestación, los alumnos estamparon sus manos en los cristales de la obra, usando pintura de agua.
Representantes del MAU han dicho que no cederán hasta que las autoridades universitarias deroguen completamente el conjunto de normas que fueron aprobadas en 2015.
El MAU es un movimiento estudiantil conformado por las asociaciones estudiantiles de cada carrera, que fueron elegidos por los mismos alumnos por lo cual ellos afirman que no son un frente como los tradicionales.
Normas reformadas
En consejo universitario, celebrado el pasado domingo se decretó que el 70% se aplicará hasta 2018, por lo cual los jóvenes podrán pasar sus clases con 65%.
Además, los estudiantes que ya hayan cursado la mitad de su carrera y no puedan aprobar una clase, tendrán cinco oportunidades para hacerlo y no tres como se había dictado anteriormente.
En cuanto al pago por exámenes de reposición, la cuota aprobada será de 100 lempiras por período, sin importar la cantidad de pruebas que tengan que reponer.
Las versiones
La vicerrectora académica, Rutilia Calderón, reiteró que el período académico se ampliará proporcionalmente al número de días que se han perdido debido a las tomas.
“El período se ampliará el número de días que sea necesario, considerando cuántos días han durado las tomas, en ese sentido, es responsabilidad de quienes realizan las tomas”, dijo Calderón.
Mencionó que en estos momentos es difícil entablar diálogos con el MAU, ya que han tenido una agenda muy cambiante.
Por su parte, Fausto Cálix, representante del MAU, declaró que sus exigencias no se basan en la derogación del 70% como índice de aprobación, sino de la derogación completa de las normas, una mejora en la infraestructura a nivel de todos los centros universitarios a nivel nacional y la inclusión del estudiantado en la creación de nuevas reglas académicas.
“Aquí no se ha ganado nada, desconocemos las resoluciones que se dieron ayer, puesto que no gozan de la legitimidad para hacer una resolución de ese tipo, son medidas preventivas y no curativas del asunto, el problema no es un índice académico, aquí el problema verdadero es la participación del estudiante en los órganos de gobierno de los que las autoridades nos han coartado”, manifestó el estudiante.
Debido a las protestas, se mencionó que peligraba la realización de la Prueba de Aptitud Académica (PAA), que está programada para este domingo. No obstante, se aclaró que sí se llevará a cabo, con más de 9,000 estudiantes a nivel nacional
