No ocurrió de noche, pero un manto oscuro y tenebroso se apoderó del hemiciclo legislativo la tarde del miércoles 14 de diciembre cuando los diputados, algunos conscientes y otros inconscientes, aprobaron con su voto el 'tarifazo' al flujo migratorio en los aeropuertos, que se vino a sumar a la ya larga lista de 'paquetazos' del gobierno.
A partir de ese momento, cuando el reloj marcaba las 2:26 de la tarde, todo quedó bajo un ambiente de normalidad. Los diputados que votaron por el nuevo 'trancazo' creyeron que su acto iba a pasar inadvertido.
Así votaron
Según el sistema electrónico del Congreso, registrado en el portal web de ese poder del Estado, a esa reunión asistieron 109 diputados, de los cuales 68 votaron por el sí, apenas uno votó en contra (Rodimiro Mejía, del Partido Nacional); hubo una abstención (Aníbal Alejandro Barrow, del Partido Liberal) y 39 no votaron. El resto estaban ausentes.
Por partidos, la votación tuvo el siguiente comportamiento: Votaron a favor uno por la UD (Hipólita Rodríguez), dos de la Democracia Cristiana; 36 del Partido Nacional y 29 del Partido Liberal.
Varios diputados de la Bancada Nacionalista por la Dignidad votaron a favor del cuestionado decreto, pero la mayoría dice que fueron 'utilizados' porque se les explicó en su momento que se trataba de un tema de seguridad nacional. Otros reconocen que votaron a favor, pero que fueron 'sorprendidos' en su buena fe. Al trascender estas excusas no se dejaron esperar comentarios de diferentes sectores de la sociedad en los medios de comunicación, en el sentido de que solo se demuestra el grado de desinterés que un parlamentario puede llegar a tener en la aprobación de un decreto, una moción o una ley de la República
Antes de esta aprobación, un diputado -de común acuerdo con la directiva del Congreso- mocionó bajo el argumento que 'por razones de seguridad' se le dispensaran dos debates al proyecto del Ejecutivo. Un total de 76 diputados apoyaron la dispensa y 31 la rechazaron.
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Contradicciones
Ante el acecho de la opinión pública, y el ojo crítico de los medios de comunicación, muchas contradicciones han salido a relucir tras el surgimiento de este nuevo método de sacar dinero que deja una aureola de dudas sobre su verdadero propósito, a dos años de finalizar el gobierno nacionalista.
Los diputados pareciera que estuvieran nerviosos porque se contradicen con la hora en que ocurrió la aprobación. El diputado udeísta, Marvin Ponce, uno de los vicepresidentes del Congreso, dice que todo ocurrió por la noche, como a la 11:30, cuando una de las secretarias del Congreso, Gladis Aurora López, se limitó a leer apenas unos dos párrafos (la parte resolutiva) del documento de 30 páginas y de inmediato lo sometió a votación.
'Honestamente hubo deslealtad de los sectores que manejan la correspondencia y no nos entregaron información a las bancadas. Nosotros de buena fe votamos. Pero los diputados de UD nos abstuvimos por norma del partido', dijo.
Ponce 'ignoraba' que la diputada por Yoro de UD, Hopólita Rodríguez, está registrada como que votó a favor del 'trancazo'. Ponce dice que él se abstuvo pero en el recuento en el portal web del Congreso aparece como que no votó.
Los liberales, en un número de 29, respaldaron la iniciativa del Ejecutivo. Wenceslao Lara, diputado liberal por Cortés, dijo: 'Yo voté en contra y creo que fuimos unos siete u ocho diputados liberales que lo hicimos así', dijo Lara.
Todos sabían
El diputado nacionalista y miembro de la Comisión de Dictamen, Francisco Rivera, coincide con la información oficial del Congreso: las 2:26 de la tarde. Todo mundo sabía lo que estaba pasando lo que pasa (es) que no le dieron la importancia del caso, inclusive la prensa, dijo Rivera.
'Lo aprobamos a las dos y media de la tarde, no fue en horas de la noche. Fue a la luz del día, a la vista y paciencia de todos los diputados y de todos los medios de comunicación que ahí estaban presentes'.
'Aquí nadie le tapó los ojos ni a los periodistas ni a los diputados, fue a pleno día', añadió el diputado.
Recordó que cuando llega al Congreso un proyecto de este tipo 'a nosotros solo nos quedan dos opciones: aprobar o improbar, nosotros no podemos modificar nada'.
La sesión fue presidida por Nora de Melgar, quien aparentemente tampoco se enteró de lo que estaba pasando.
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Congreso Nacional se lava las manos y le echa culpa al Poder Ejecutivo
El Congreso Nacional en un comunicado de prensa culpa al Poder Ejecutivo de haber actuado con ligereza en la sesión del 14 de diciembre.
'Dicho contrato fue catalogado como un tema de seguridad nacional por el Ejecutivo y por eso el Congreso Nacional lo aprobó con la celeridad que el caso ameritaba', dice.
Añade que el Poder Legislativo lo aprobó 'a solicitud del Ejecutivo, sin hacerle modificaciones ni anexos, ya que por ley no se pueden realizar cambios a contratos firmados por el Ejecutivo y entendiendo que el Ejecutivo ya había analizado la conveniencia del mismo'.
'El Congreso Nacional creará una Comisión Técnica integrada por representantes de las cinco bancadas, la que se encargará de ahora en adelante de revisar todos los proyectos y contratos antes de que los mismos sean discutidos por los diputados, en vista de que no es la primera vez que el Ejecutivo envía contratos ya negociados que posteriormente provocan malestar al pueblo hondureño', dice.
Dicha Comisión Técnica solicitará cambios a los contratos suscritos por el Ejecutivo y otras empresas cuando considere que atentan contra los intereses de los hondureños.
El decreto que ha generado la polémica 'fue aprobado a las 2:26 de la tarde, a plena luz del día y que la sesión fue transmitida en vivo por el Canal 20 del Congreso Nacional. La lista de los diputados que votaron a favor puede ser revisada en nuestra página de Internet (www.congresonacional.hn)'.
