TEGUCIGALPA, HONDURAS.- La mayoría de los diputados de la bancada del Partido Salvador de Honduras (PSH) manifestaron su total rechazo a que desde el Congreso Nacional se vuelvan a destinar recursos para la gestión de obras a través del Fondo Social Departamental (FSD).
Desde el jefe del grupo de diez congresistas de esta novel institución, Tomás Ramírez, así como otros parlamentarios coincidieron que su labor se debe de centrar en legislar y no manejar dinero para proyectos de ninguna índole, postura que también comparte Salvador Nasralla, fundador de esta organización política.
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La diputada Maribel Espinoza comentó que “no estoy a favor del clientelismo político de ninguna naturaleza, los proyectos sociales deben ir a favor de todos los ciudadanos sin excepciones, pero esta es una práctica del gobierno nacionalista que utilizó los fondos públicos para clientelismo político, para lograr sus propósitos y al final destruir nuestra nación”.
“Tenemos que hacer cambios, no podemos mantener ese clientelismo político. Nosotros podemos llevar las inquietudes y necesidades de nuestras comunidades a los funcionarios del Poder Ejecutivo para que estos apoyen a las comunidades, eso es lo correcto”, agregó.
Luego de afirmaciones del diputado suplente de Libertad y Refundación (Libre), Octavio Morales, que se desembolsaría un millón de lempiras para los propietarios y 500,000 lempiras a los sustitutos por concepto del FSD, se abrió una vez más la polémica y provocó señalamientos contra el CN.
El titular del Poder Legislativo, Luis Redondo, aclaró que no se había hecho ningún pago y que el capital no terminará en las manos o cuentas de congresistas, como en el pasado.
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Mecanismo delictivo
La directora ejecutiva del Consejo Nacional Anticorrupción (CNA), Gabriela Castellanos, destacó que “el cambio de nombre del Fondo Departamental solo es un cosmético barato de un mecanismo delictivo usado por los políticos para favorecer las ambiciones de campaña electoral”.
Con el mismo canto de sirenas ahora se le denomina fondo social, indicó al tiempo que se preguntó si a través de Organizaciones No Gubernamentales (ONG) se canalizarán los millonarios recursos que son parte de este programa.
Como la fuente de corrupción más grande de los últimos tiempos calificó al FSD el fiscal jefe de la Unidad Fiscal Especializada contra Redes de Corrupción (Uferco), Luis Javier Santos, asegurando que mediante este se desviaron más de 16,000 millones de lempiras por medio de varias ONG de maletín.