Tegucigalpa, Honduras
El Nazareno cumplió su misión y, en un acto de extrema misericordia, fue crucificado para perdón de los pecados de la humanidad. Su cuerpo fue llevado al sepulcro la tarde del viernes en medio del amor y la gratitud de su pueblo.
Ese sentimiento sigue intacto en la comunidad católica hondureña, la cual se reunió el viernes en el centro de Tegucigalpa durante la Procesión del Santo Entierro.
La tradición católica que se basa en llevar el cuerpo de Jesús, luego de haber sido crucificado, al sepulcro donde reposará hasta el día de la resurrección, hoy domingo, reunió a miles de fieles.
La tarde-noche del viernes, la congregación estaba lista fuera de la Iglesia Catedral San Migue Arcángel.
Dos hermosas carrozas hicieron el recorrido desde la Plaza Central, cruzando la avenida Cervantes, hasta la iglesia El Calvario, en el Barrio Abajo.
En medio de música, cantos y aplausos, el Cristo Yacente fue venerado por los feligreses, que lo vieron recorrer las calles en el anda que fue cargada por la Sociedad de los Caballeros del Santo Entierro.
La gente estaba encantada con todos los actos que se llevaron a cabo, entre los cuales resaltó el desfile de mensajes como muestra de amor a Dios por parte de niños y jóvenes.
“Estuvo muy bonito, es uno de los momentos más emotivos de la Semana Santa, donde te das cuenta del verdadero significado de lo que Jesús hizo por nosotros al dar su vida sin esperar nada a cambio. Fue bonito ver cómo tanta gente andaba ayer en familia: esposos, hijos, hermanos y abuelos unidos por el amor a Jesús”, dijo Alejandra Núñez.
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Las carrozas
Fueron meses de arduo trabajo las que se realizaron para las carrozas, que el viernes fueron presentadas.
Adornadas con símbolos religiosos, flores, mantas y demás, los presentes se deleitaron con cada alegoría.
En la procesión fue cargada la Virgen de la Soledad, una advocación de María con su corazón atravesado por una lanza, que sufre en carne propia el dolor de la muerte de su hijo.
La carroza fue cargada por 91 miembros de la Sociedad de Caballeros del Santo Entierro, que trabajaron de manera ardua durante seis meses.
Este año su significado fue doble: la muerte de Jesús y su sacrificio por la humanidad. Y en la parte trasera se anunció su victoria ante la muerte mediante su resurrección.
La carroza desplazó el Cristo Yacente y en la estructura lo acompañaron José de Arimatea y Nicodemo.
En esa parte se pudo observar a los ángeles haciendo el anuncio a María Magdalena de la resurrección de Jesús, la cual al llegar al sepulcro se enteró que el cuerpo de su Señor había sido removido.
En la parte superior del anda, un ángel portaba un cirio pascual en representación de Cristo Resucitado.
El anda tenía un peso de al menos 3,000 libras, informó la Sociedad de Caballeros del Santo Entierro.
“Para nosotros es un orgullo ser parte de esto, es algo que nace en nuestro corazón y que hacemos con amor aunque represente un sacrificio físico, lo hacemos para Dios”, manifestó Francisco Navarro, miembro de la Sociedad de Caballeros.
Por su parte, el Adorno de la Imagen del Cristo de la Misericordia se robó las miradas al sobresalir la figura de Cristo en medio de un trono dorado siendo glorificado.
También se observaron las figuras de Adán y Eva al momento de ser sacados del Jardín del Edén.
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Devoción
El Evangelio según San Juan dice en el capítulo 15, versículo 13, que no hay mayor amor que dar la vida por sus amigos. Y ese es el amor que hizo que miles de personas, niños, jóvenes y ancianos llegaran antes de la hora a presenciar el Santo Entierro.
“Tú moriste por mí, ahora yo viviré para ti”, fue una de las frases que sobresalía en pancartas hechas por los asistentes.
Los jóvenes inundaron las redes sociales mostrando, orgullosos, su fe católica.Los adultos, en suprema devoción, miraban los actos que se desarrollaban frente a ellos. Mientras que los más pequeños se las ingeniaron para poder observar la procesión.
No faltaron algunos que tuvieron que subirse a los balcones de negocios o de casas aledañas para poder apreciar el Santo Entierro.
Durante el recorrido, la feligresía acompañó las carrozas con cánticos y oraciones, llegaron a la Capilla del Santo Sepulcro donde, a eso de las 8:00 de la noche, el cuerpo de Jesús fue sepultado.
Para el día de hoy todo el mundo recordará y conmemorará la resurrección de Cristo, como muestra de victoria ante el pecado y la muerte.
