Honduras

El salón de sesiones del Congreso Nacional lucirá remozado y pulcro

En el marco de la instalación del nuevo Legislativo y la sesión para clausurar la cuarta y última legislatura del actual Congreso, se comenzó a repintar las paredes del recinto al igual que a revisar los asientos de la platea. Diputados que no volverán ya se están llevando sus pertenencias

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13.01.2018

Tegucigalpa, Honduras
Desolado y vacío ha lucido en los últimos tres meses, pero el orden y la pulcritud se mantienen, más aún en vísperas de clausurar la cuarta y última legislatura del Congreso que inició funciones desde el 2014.

En cada curul solo han quedado las computadoras asignadas a los 128 diputados, mientras que en el estrado donde están los puestos de la junta directiva yace la placa que identifica a cada uno de sus miembros, pero que tendrán que ser removidas una vez se instale el nuevo Legislativo.

El salón de sesiones está siendo preparado para recibir con sus mejores galas a quienes fungirán como congresistas por los próximos cuatro años, una parte de ellos volverá a repetir en sus cargos y más de la mitad de los ciudadanos que resultaron electos debutarán en política y, por ende, en actividades parlamentarias.

Algunos de los asientos ubicados en la platea del recinto han sido inspeccionados por personal del área de mantenimiento para proceder a su reparación y estar en óptimas condiciones para el próximo 21 de enero, fecha en la que asume el nuevo CN.

En esos lugares se ubican a funcionarios, miembros del cuerpo diplomático, invitados especiales, incluyendo la prensa que le dará cobertura al acto de instalación de la primera legislatura del período 2018 al 2022.

El Palacio Legislativo data de 1951, cuya construcción se efectuó mediante el decreto 47 del 30 de enero de ese mismo año, el cual fue aprobado por Camilo Gómez y Gómez, presidente del Congreso de aquel momento, destinándose un presupuesto de 1.4 millones de lempiras.

Remozan interiores
EL HERALDO
constató que el interior del hemiciclo está siendo remozado, donde se repintaron las paredes e hicieron otro tipo de trabajos de rutina con los sistemas de audio e iluminación.

Con nostalgia en sus rostros, algunos actuales congresistas que no fueron reelectos han ido a traer ciertas pertenencias en los cubículos que tienen asignados en uno de los edificios de la sede de este poder del Estado a la espera de la convocatoria a la última sesión ordinaria.

Muchos de estos parlamentarios continuarán con sus ocupaciones, otros asumirán cargos ya sea como alcaldes o regidores y unos cuantos todavía lamentan no haber alcanzado los votos necesarios para continuar ocupando sus curules.

Tal y como en otras ocasiones, los nuevos diputados pasarán por un proceso de inducción en cuanto a la técnica parlamentaria, más conocida como la “escuelita”, confirmó a EL HERALDO una fuente ligada a la actual directiva.

Un total de 68 son los nuevos legisladores para el próximo Congreso, quienes al ser neófitos en política, ajenos a la abogacía y al ámbito que será de su competencia, deberán de aprender los aspectos básicos del funcionamiento del Poder Legislativo así como la forma de presentar mociones, iniciativas de ley o proyectos de decreto