TEGUCIGALPA,HONDURAS.- En las remotas zonas rurales de Honduras, la precariedad de la educación se materializa en las desgastadas paredes de los centros educativos unidocentes.
En pleno siglo 21 la imagen de un solo maestro enseñando a niños de seis diferentes grados educativos sigue siendo una triste realidad.
Las estadísticas se mantienen, hoy en día; 3,558 centros educativos operan bajo este sistema, de acuerdo a las cifras oficiales de la Secretaría de Educación.
Los datos revelan una profunda crisis en el sistema educativo que afecta a más de 100,360 alumnos. Cada mañana, los maestros las escuelas unidocentes enfrentan un desafío enorme.
Con limitados recursos y sin el apoyo de nuevos textos ni material didáctico actualizado, deben enseñar todas las materias a estudiantes de diferentes niveles educativos, desde primero hasta sexto grado. La carga no solo es agotadora para los maestros, sino que también tiene un impacto devastador en la calidad de la educación que los niños reciben.
Todos los días, Julio Portillo se dirige a la Escuela Esteban Guardiola en la aldea San Juan de río Grande, Francisco Morazán. Como único maestro en la escuela, su principal reto no es solo la unidocencia, también tiene que enfrentarse a las pésima condiciones en las que se encuentra el centro educativo.
“Aquí, enseño desde matemáticas, ciencias y español, todo en el mismo salón y al mismo tiempo. Es un milagro que podamos avanzar”, asegura el maestro.
La realidad, sin embargo, es que avanzar es un desafío al que el maestro no se puede negar. Los niños, cada uno con diferentes niveles de comprensión y necesidades educativas, luchan por mantener el ritmo.
“Son varios los factores que dificultan el buen aprendizaje de los niños, acá no hay ni energía eléctrica y con eso le digo todo”, lamentó Portillo.
Baja calidad educativa
El resultado de esta situación es un brutal rezago escolar. Denis Cáceres, experto en Educación, señaló que los alumnos de estos centros unidocentes enfrentan enormes deficiencias en todas las áreas del conocimiento.
“Usted está obligado a tener escuelas unidocentes, porque usted no puede tener dos docentes donde hay centros educativos que apenas tienen 7 o 5 alumnos “, recalcó.
Sostuvo que el verdadero problema está en aquellas escuelas donde la cantidad de estudiantes en mayor a los 40. Daniel Sponda, ministro de Educación, confesó que sí se necesitan más maestros en el país.
“Sí lo reconocemos, el país necesita más maestros, porque está aumentando la matrícula”, confesó Sponda.
Dijo que la mayoría de los centros unidocentes, operan bajo esa modalidad porque la matricula es baja.
“Está demostrado que las escuelas unidocentes cuando tienen un buen maestros los indices de calidad pueden ser hasta superiores, porque en el mismo salón de clases, hay seis grados, primero se pone a trabajar con un niño de primer grado y luego con el segundo. Un niño avanzado de primer grado esta poniendo atención en el contenido de segundo grado”, declaró.
