Honduras

Excomisionado Leiva Natarén se refugia con visa de inversionista en EE UU

El exoficial es requerido por la justicia hondureña por el delito de lavado de activos y pide a EE UU su extradición

24.02.2020

TEGUCIGALPA, HONDURAS.- El excomisionado de la Policía Nacional, José Orlando Leiva Natarén, se refugia con una visa de inversionista en Estados Unidos. Cuando él se enteró que existía un requerimiento fiscal con orden de captura, huyó del país y se escondió de las autoridades que trataban de presentarlo ante la justicia.

Su destino fue Estados Unidos. Allá montó una empresa para continuar con sus actividades, comentó a EL HERALDO una fuente ligada a las investigaciones.

Él se encuentra en Florida con una visa de inversionista y maneja una empresa de transporte de carga, precisó la fuente.

La Fiscalía pidió la extradición de él y está sumamente avanzada. Leiva Natarén está ubicado en Florida y su esposa en Nueva York, solo estamos esperando que el gobierno de Estados Unidos los extradite, señaló la fuente.

En los últimos meses, las autoridades de la Fiscalía han sostenido una comunicación con agentes de la Oficina de Asuntos Internacionales de Narcóticos y Aplicación de la Ley de Estados Unidos (INL por sus siglas en inglés), quienes se sorprendieron cuando se enteraron que él estaba como inversionista en Estados Unidos.

Bienes

Leiva Natarén y su esposa son acusados del delito de lavado de activos al no poder justificar la procedencia lícita de más de 130 millones de lempiras.

En mayo de 2018, el Ministerio Público le aseguró varios bienes a Leiva Natarén, entre ellos dos residencias, tres gasolineras, una agencia de venta de partes automotrices, varias unidades de equipo pesado, transporte de carga, un colegio de educación secundaria, viviendas y carros de lujo, además de más de 50 cuentas bancarias.

Durante varios años, el excomisionado fungió como jefe del Centro Penal de San Pedro Sula.

Leiva Natarén, depurado en 2016 y con orden de captura con alerta roja internacional, entre 2006 y 2017 presentó un comportamiento financiero atípico, llegando a mover en el sistema financiero alrededor de 913 millones de lempiras, teniendo un incremento patrimonial injustificado de 300 millones de lempiras, de los cuales 282 millones corresponden a las operaciones de la Corporación Natarén S. de R.L. (Conar).