El expresidente de Honduras, Porfirio Lobo Sosa, invocó este martes, a ' los jinetes del Apocalipsis' tras entregar su residencia El Chimbo, en la periferia de la capital hondureña, a la Oficina Administradora de Bienes Incautados (OABI), tras recibir una orden de este ente.
Lobo, explicó que la casa la pagó su mujer, Rosa Elena Bonilla (acusada de malversación de fondos, abuso de autoridad y asociación ilícita), en 2004 y que fue requerida por la OABI tras el proceso legal que lleva esta.
Ante ello, el expresidente Lobo, dijo que 'no puedo dejar de mencionar las muchas irregularidades que ha habido en el proceso contra mi Rosa, mi esposa. Irregularidades que van desde una serie de atropellos y malas prácticas que se han seguido en el proceso' y consideró que es una orden que se dio desde el actual gobierno hondureño para complacer a la Misión de Apoyo contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (Maccih).
Lobo Sosa definió que su esposa es 'una presa política de la decisión que los famosos cinco tomaron en Casa Presidencial. Ellos tomaron esa decisión y por eso el proceso legal está viciado y está forzado', remarcó.
'No hay fundamento legal, los miraré cuando lleguemos a la Corte Suprema de Justicia (CSJ) donde estoy seguro -y espero- que se aplicará la ley cómo debe ser y mi Rosa recuperará la libertad'.
El exmandatario citó entonces a los cuatro jinetes del Apocalipsis de La Biblia, adaptándolo a cinco, según citó a los funcionarios de Casa de Gobierno anteriormente.
'Aquí estoy, de pie, firme. Cero resentimiento con mi partido (Nacional), porque es el gobierno de mi partido podría estar molesto. No es mi partido, son los cinco jinetes del Apocalipsis, ¡esos son!', remarcó.
Los jinetes del Apocalipsis, según la teología cristiana, son hombres que montan caballos de colores blanco, rojo, negro y bayo. Según la exégesis representan y son alegorías de la conquista o la victoria, la guerra, el hambre y la muerte.
Luego le consultaron a Lobo los nombres de los 'cinco jinetes', y dijo: 'Ya lo explicamos allí, son las decisiones que tomaron cinco allá. ¿Y ustedes no saben los nombres? ¡Lo dudo! ¡Lo dudo!', tiró Lobo quien aseguró que Dios se hará cargo y que de la justicia divina no se escapa nadie.
Luego, Sosa lanzó mensajes subliminales contra los ejecutores del proceso legal contra su esposa, citando el poema del poeta alemán Bertolt Brecht llamado 'Primero vinieron', en relación a la indiferencia que segun él, vive su familia.
'Primero se llevaron a los judios, pero como yo no era judio no me importó - y esto lo leo para aquellos indiferentes-, después se llevaron a los comunistas, pero como yo no era comunista tampoco me importó. Luego se llevaron a los obreros, pero como yo no era obrero, tampoco me importó. Más tarde e llevaron a los intelectuales, pero como yo no era intelectual, tampoco me importó. Después sigueron con los curas, pero como yo no era por los curas, pero como yo no era cura, tampoco me importó. Ahora vienen por mí, pero es demasiado tarde'.