El fiscal Roberto Ramírez Aldana confirmó este viernes que se encuentra en Honduras y que luego de recibir amenazas a muerte, solicitó al Comisionado Nacional de Derechos Humanos (Conadeh) protección para él y su familia.
El titular del Conadeh, Roberto Herrera Cáceres, reveló por la mañana que Ramírez Aldana acudió al organismo en busca de protección y reveló que su vida corría peligro.
'Fue a denunciar que se sentía amenazado en su vida, en su integridad y la de su familia y que era necesario ver qué formas podíamos nosotros como comisionado asegurarles nuestra protección', declaró Herrera a los medios de comunicación.
En respuesta a la denuncia, 'nosotros hicimos comunicaciones tanto con las autoridades del gobierno, quienes le estaban dando una protección reforzada, como también algunos medios internacionales para comunicarles de esa situación'.
El funcionario se presentó la semana pasada al Conadeh para presentar su caso a Herrera Cáceres y fue entonces cuando se dio apertura a un expediente que al igual que el resto de los que maneja el organismo 'goza de absoluta reserva', dijo el ombudsman hondureño, quien declinó revelar el contenido del mismo y sostuvo que desconocía la salida de Honduras del titular de la Unidad de Apoyo Fiscal del Ministerio Público.
'Lo que nos preocupa diariamente en todo el territorio nacional es salvar vidas, salvar integridad física. Las personas amenazadas siempre acuden al comisionado y ahí estamos nosotros para asegurarles medios de protección en colaboración con el gobierno e instancias internacionales', insistió.
Agregó que 'los operadores de justicia están expuestos a estas circunstancias, especialmente en momentos críticos de violencia como los que vivimos y de delincuencia organizada y en este sentido, es necesario velar por todos ellos también, en particular por sus familias y no deben sentirse solos, como no debe sentirse sola ninguna persona en situación de riesgo'.
Ramírez Aldana se presentó esta tarde a los juzgados de la capital para interponer nuevos recursos contra implicados en el caso de corrupción del Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS) y declaró que aunque ha recibido amenazas a muerte no saldrá del país.
'Lamento que personas, no entiendo con qué tipo de intereses, hayan malinformado o hayan filtrado información a los medios de comunicación acerca de que yo había salido del país. No he contestado llamadas ni nada porque tengo inhabilitadas las líneas telefónicas por razones de seguridad', afirmó.
Anunció que realizará un viaje fuera de Honduras 'en los próximos días, muy cercanos, y estamos siempre realizando las diligencias al frente de la unidad'.
De acuerdo a versiones no confirmadas que trascendieron en medios de prensa, Ramírez Aldana habría recibido un ultimátum hace 10 días acerca de que si no desistía de actuar en los juicios de la corrupción en el IHSS se le iba a quitar la vida.