El gobierno declaró ayer emergencia en el sistema de salud nacional ante el daño ocasionado por el personal médico que se mantiene en huelga en los diferentes centros asistenciales del país.
En sesión extraordinaria de Consejo de Ministros, el Poder Ejecutivo autorizó a la Secretaría de Salud, mediante decreto PCM 013-2012, “emprender las acciones necesarias” para restablecer y garantizar la prestación de los servicios médicos a la población hondureña.
La medida fue adoptada ante la huelga
que mantienen unos 400 estudiantes internos y de servicio social que desde hace casi un mes abandonaron las emergencias en demanda de un incremento a la beca, que actualmente es de 5,000 lempiras por mes.
Más de 50 técnicos de Rayos X, laboratorios y otras áreas de atención del hospital Escuela también abandonaron sus labores al exigir el cumplimiento de un decreto que establece una nivelación salarial a personal en riesgo laboral.
El gobierno también instruyó a la secretaria de la Presidencia, María Antonieta Guillén, a convocar de manera inmediata a todos los actores relacionados con el sector salud “a fin de buscar una solución inmediata a la actual problemática y realizar una revisión integral del sistema de salud pública”.
Sorprendentemente, minutos después de la aprobación del decreto, la ministra de la Presidencia apareció en un evento político convocado por el presidente del Congreso Nacional, Juan Orlando Hernández, y se anunció la reunión con el sector salud para horas de la tarde. En la reunión, realizada en Casa Presidencial, únicamente se abordaron “opciones” para solucionar la crisis en salud y se acordó continuar las pláticas este día, luego de la sesión ordinaria de Consejo de Ministros.
Es de mencionar que con el decreto de emergencia en el sector salud el gobierno podrá declarar ilegal la huelga que mantienen los internistas y tomar acciones legales en contra de los estudiantes de medicina, tal como ocurrió el año anterior en el sector educación, con la suspensión de al menos 305 profesores que abandonaron sus labores sin justificación.
En su artículo 1, el decreto de emergencia aprobado en Consejo de Ministros reza: “declarar estado de emergencia a nivel nacional en el sistema de salud público nacional, quedando la Secretaría de Estado en el despacho de Salud autorizada para adoptar las medidas, acciones y providencias necesarias para restablecer y garantizar la prestación inmediata de los servicios de salud pública a la población”.
Crisis
El gobierno tomó las riendas de la problemática en salud, luego de diez días de huelga en el principal centro asistencial del país y una semana en los 28 que conforman la red sanitaria.
Para mantener el funcionamiento del hospital Escuela, ayer se determinó pedir el auxilio a las Fuerzas Armadas con personal militar para atender las distintas áreas descubiertas por parte del personal técnico.
Marco Molinero, director de este centro asistencial, manifestó que hay “15 elementos del ejército que nos brindarán seguridad, pero además de eso hay 25 personas que vienen a capacitarse sobre instrumentalización quirúrgica, ya que se van a poner en los quirófanos para que nos apoyen en ese sentido”.
Además se buscó personal para la atención a los pacientes, detalló el funcionario. “También contamos con 50 licenciadas en enfermería que prestan su servicio social, previo a obtener su título, quienes nos asistirán en los quirófanos”.
Molinero manifestó que ya se hizo la primera contratación de 53 médicos generales para que apoyen a los médicos especialistas y residentes.
“Tenemos la opción de contratar técnicos en laboratorio para realizar los exámenes a las personas de consulta externa, un técnico en rayos X para la radiología selectiva... poco a poco iremos cubriendo la atención de los pacientes”.
Daños
Las desatenciones ocasionadas por la huelga han generado una mora enorme y complicaciones a la salud de los pacientes.
Ayer el ministro de Salud, Arturo Bendaña, manifestó que se han dejado de practicar “975 cirugías, 5,300 consultas y 4,000 exámenes de laboratorio, y se han dejado de tomar 5,000 placas de rayos x”.
Bendaña aclaró que no hay más presupuesto que 15 millones de lempiras para el pago a los técnicos, con el que se cancelarían los beneficios laborales que exigen.
Además acotó que tampoco hay dinero para el incremento del salario beca que piden los estudiantes internos y en servicio social; “los incrementos que ellos piden tienen un impacto de 95 millones de lempiras”.
Ante la huelga de los estudiantes de medicina, la rectora de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Julieta Castellanos, advirtió ayer que los internos deberán repetir su pasantía si no se reincorporan a las salas de emergencia de los principales hospitales del país.
“Vamos a realizar la suspensión de la pasantía que ellos están ahora abandonando, porque nosotros consideramos que es una falta grave que ellos hayan abandonado las emergencias”, advirtió Castellanos.
Estudiantes insisten con huelga
Los
estudiantes de medicina de último año
que cursan el internado rotatorio, a un mes de no presentarse a sus labores en el hospital Escuela, se mantienen firmes en sus posturas, igualmente los que ya tienen una semana de haberse ausentado de las emergencias.
A pesar de las amenazas de la rectora de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Julieta Castellanos, de suspender la pasantía del internado rotatorio por tres meses y la remuneración de la beca, los estudiantes se mantienen en huelga.
La marcha que tenían programada hacia los bajos del Congreso Nacional la pospusieron para reunirse nuevamente en asamblea informativa por las medidas adoptadas por el gobierno.
Por si fuera poco, decenas de empleados de varios centros de salud de la capital se apostaron ayer en las afueras de Casa Presidencial para exigir el cumplimiento de salarios y la destitución del secretario de Salud, Arturo Bendaña.
Los trabajadores protagonizaron una fuerte protesta en las afueras de la sede del Ejecutivo, al tiempo que se discutía la aprobación de la emergencia en el sistema sanitario del país.
+ Drama humano y muerte enfrentan pacientes por huelgas en salud