El gobierno, a través de la Secretaría de Relaciones Exteriores, decidió la noche del sábado suspender la emisión y cobros por carnés de identificación consular.
Esta determinación, de último momento, se tomó ante las denuncias de ciudadanos que afirmaron haber sido víctimas de cobros de hasta 50 dólares por la emisión de este carné.
En la circular 002-DGAC-2014 remitida por el canciller por ley, Roberto Ochoa Madrid, a todos los cónsules generales y encargados de asuntos consulares, se les recuerda que la emisión de dichos carnés estaba prohibida.
Ochoa hace referencia a las circulares 039-DGAC-2011 y 001-DGAC-2013 que prohibían estas emisiones.
Pese a ello, las emisiones continuaron, por lo que ahora procede abrir una investigación y deducir responsabilidades a los funcionarios que violentaron la ley.
Ochoa le recuerda en la circular a los funcionarios diplomáticos que los únicos documentos legales de identificación personal son la tarjeta de identidad y el pasaporte.
“Todo documento emitido al margen de la ley y de las instrucciones de esta Secretaría de Estado son ilegales y los responsables de su emisión están sujetos a sanción de conformidad al reglamento 263-2011, incluyendo la cancelación del cargo, sin perjuicio de la responsabilidad penal y administrativa”, dice la circular.
“En consecuencia se reitera la prohibición de emitir documentos de identificación personal que no se encuentran autorizados por la ley”, concluye Ochoa.
En función de lo anterior, la cancillería puede solicitar a cada consulado la auditoría para saber en cuáles de estas se han emitido carnés de identificación consular desde 2011 a la fecha.
EL HERALDO tuvo acceso a carnés que fueron emitidos en los últimos días en varios consulados, entre ellos el de Los Ángeles.
A efecto de terminar con esta práctica, el propio presidente Juan Orlando Hernández la noche del sábado también emitió el acuerdo presidencial 01-DGAC-2014.
El acuerdo establece que de conformidad al ordenamiento jurídico interno, los únicos documentos legales de identificación personal para los ciudadanos hondureños son la tarjeta de identidad y el pasaporte.
El acuerdo firmado por Hernández también establece que ya la Secretaría de Relaciones Exteriores había establecido, mediante las circulares 039-DGAC-2011 del 30 de agosto de 2011 y 001-DGAC-2013 del 8 de agosto de 2013, que estaba prohibida la emisión de carnés de identificación como documento de identificación personal.
El numeral 1 del acuerdo presidencial establece: “desautorizar la emisión de carnés de identificación por parte de particulares, los cuales no son reconocidos como documentos oficiales del Estado de Honduras”.
El numeral 2 dice: “instruir al servicio consular hondureño de abstenerse de emitir y cobrar por carnés de identificación personal, en virtud que los mismos no han sido autorizados por ley.
En el numeral 3, el gobierno advierte que “la no observancia de esta disposición estará sujeta a las sanciones establecidas en el reglamento 263-2011 publicado en el diario oficial La Gaceta del 29 de junio de 2012, inclusive la cancelación del cargo de los responsables, sin perjuicio de la responsabilidad penal y administrativa.
Finalmente, se instruye en el acuerdo a la Secretaría de Estado de Relaciones Exteriores y Cooperación Internacional; y a la Secretaría de Derechos Humanos, Justicia, Gobernación y Descentralización para que en coordinación con el Registro Nacional de las Personas (RNP) y en el término de 15 días, presenten una propuesta a la Presidencia de la República a fin de establecer un sistema de identificación para los emigrantes hondureños que reúna garantías de seguridad y transparencia, evitando cobros abusivos al margen de la ley.
El acuerdo fue firmado por el presidente Juan Orlando Hernández en la ciudad de Gracias, Lempira, la noche del pasado sábado.