TEGUCIGALPA, HONDURAS.- “Veo el diálogo político con mucho optimismo”, confió el presidente Juan Orlando Hernández al regresar de su viaje a Colombia, donde presenció la toma de posesión de Iván Duque como nuevo mandatario.
El Presidente se mostró anuente a participar en las cuatro mesas de trabajo y aseguró que como gobierno “nosotros vamos a estar listos para dialogar en cualquier foro que nos llamen”. Hernández exclamó su preocupación al referirse a los partidos políticos que no estarán presentes en el diálogo “y nos reclaman a nosotros”.
Además enfatizó que “toda reforma electoral no solamente tiene que pasar por el Congreso, sino que requiere 86 votos”, ya que se pueden pactar decisiones en el diálogo que al llegar al legislativo no reciban suficientes votos y “estaríamos entrampados”.
El Presidente también argumentó que es en el “Congreso Nacional por esencia en donde se van a ir a materializar la mayoría de estas reformas”. La postura de Hernández fue compartida por Reynaldo Sánchez, presidente del Comité Central del Partido Nacional (CCPN), que enfatizó en un comunicado que “estamos listos para el diálogo y aprobar lo que sea necesario”. Retó además a iniciar pronto ya que “cuando no se quiere hacer algo buscan excusas”.
Reuniones con la ONU
Mientras los actores políticos se terminan de poner de acuerdo, el grupo de facilitadores contratados por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) se ha venido reuniéndo con diversos actores para ampliar sus conocimientos de la situación que se vive en el país.
Igor Garafulic, representante de la ONU en Honduras, confió que en el caso de la experta estadounidense Marcie Mersky, miembro del Departamento de Asuntos Políticos de Naciones Unidas y encargada de la mesa de Derechos Humanos, “se reunió con Ebal Díaz, ministro de la Presidencia; Karla Cueva, ministra de Derechos Humanos y con Soledad Pazo, representante de la Oficina del Alto Comisionado”.
Comentó que Mersky también se reunió con un “grupo de derechos humanos que llevó Salvador Nasralla al igual que con los representantes del Partido Liberal”.
El motivo de las reuniones ha sido conocer de primera mano “las expectativas de cada uno de ellos en relación con la mesa de derechos humanos”. El resto de los facilitadores, por su parte, también han tenido la oportunidad de reunirse de forma privada con las partes interesadas en lo que serían acercamientos diplomáticos para llegar a las mesas con sus valoraciones de sus mesas.