Tegucigalpa, Honduras
El comisionado presidente del Instituto Hondureño de Transporte Terrestre (IHTT), Roberto Zacapa, expuso este jueves que todo el proceso de modernización que se está ejecutando es con base en la ley.
La Ley del Instituto Hondureño de Transporte Terrestre publicada el 30 de marzo de 2016 es el motor de toda esta modernización y el decreto legislativo aprobado el miércoles anterior por el Congreso Nacional es el combustible.
Todo este proceso se está haciendo con base en estos estamentos legales, ya que el artículo 76 de la Ley de Transporte establece de manera contundente que los concesionarios del transporte público deben ser acreedores de los incentivos fiscales necesarios para poder importar de manera directa las unidades.
“No es novedad, más bien ya era un imperativo y una obligación estatal que mediante un nuevo decreto legislativo se definiera de manera precisa cuáles son esos incentivos fiscales y las exoneraciones de las que deben ser acreedores los concesionarios del transporte público para poder modernizar las flotas”, declaró.
El decreto también exonerará la importación de todo el sistema informático de seguridad que será implementado en todas las unidades del transporte público.
Este equipo son las cámaras de vigilancia, sistemas de GPS, así como los validadores de tarjetas prepago, facilitando la adquisición de toda esta tecnología.
Zacapa explicó que desde que entró en vigencia la nueva Ley de Transporte desaparecieron los bonos y subsidios para este rubro.
Por ejemplo, desde 2012 a la fecha no se les pagó bono ni subsidio a los transportista de la capital, a pesar de que se continuó manteniendo los cuatro lempiras de tarifa, alcanzando una deuda de entre los 1,000 y 1,100 millones de lempiras.
En ese sentido, el Estado no pagará esa cantidad, sino que les dará una serie de incentivos fiscales para poder comprar unidades nuevas; además, los transportistas gozarán de líneas de crédito a bajo interés y a plazos extendidos, apuntó Zacapa.