La lluvia, que cayó solo por algunos minutos, mojó las calientes y polvorientas calles de la ciudad que ha sufrido el largo período de la canícula.
A través de sus redes sociales, la Comisión Permanente de Contingencia (Copeco) avisó sobre las condiciones climáticas que traerían lluvias y chubascos acompañadas de actividad eléctrica.
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En su momento, Centro de Estudios Atmosféricos Oceanográficos y Sísmicos (Cenaos) informó que la presencia de lluvias en Honduras se estabilizaría del 5 al 10 de septiembre, pronóstico que sí se percibió en varias zonas del país.
La falta de lluvias en la capital del país mantiene secas las represas, por lo que el Servicio Autónomo Nacional de Acueductos y Alcantarillados (SANAA) se ha visto obligado a reducir los abastecimientos del vital líquido en los barrios y colonias.
La sequía también obligó a prohibir la venta del agua en negocios de lavado de vehículos y cerrar las estaciones donde llenan las cisternas a partir de las 12:00 del mediodía.
Habitantes de algunas colonias afectadas se han tomado las carreteras en señal de protesta.
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