Tegucigalpa, Honduras.- El presidente del Congreso Nacional, Luis Redondo, atribuyó a una “masiva campaña mediática de desinformación y distorsión de la información” las calificaciones sobre que el poder del Estado que preside es el peor de la historia democrática de Honduras.
A través de una intervención en Space de X/Twitter, que luego condensó en un pronunciamiento escrito, Redondo afirmó que quienes señalan al Hemiciclo como un órgano fallido están “minimizando” la magnitud de la crisis política, económica y social que ha vivido Honduras durante las últimas cuatro décadas.
“Pretenden que en cuatro años se corrijan más de cuatro décadas de latrocinios, desfalcos, corrupción y narcotráfico enraizado en todo el Estado, en lo público y en lo privado”, expresó Redondo.
Sobre Redondo hay críticas desde la oposición política como la sociedad civil por varias prácticas que denotan abuso y ineficacia. Por ejemplo, no ha logrado alcanzar un consenso para la aprobación del Presupuesto General de la República 2025, proyecto que deberá votarse hasta en enero próximo.
Igualmente, Redondo enfrenta valoraciones negativas por la decisión de entregar dinero a los diputados, a través de bonos y subvenciones, acciones que él mismo criticó cuando se realizaron por administraciones pasadas por medio del Fondo Departamental.
El titular del Legislativo atribuyó que los problemas estructurales de país no son producto de su gestión, sino de “los 42 años de gobernanza bipartidista que han marcado la historia reciente de Honduras”.
El Partido Nacional y el Partido Liberal, el bipartidismo que dominaeon la política hondureña desde la promulgación de la Constitución de 1982, son señalados por Redondo como responsables de “fraudes electorales y narcotráfico”.
Según el titular del Legislativo, estos partidos no solo llevaron al país a una crisis económica, sino que también “permitieron la penetración del crimen organizado en las instituciones estatales”.
Del mismo modo, Redondo, elegido como uno de los peores funcionarios de 2024, criticó a las organizaciones no gubernamentales (ONG) que, según él, se han “alineado” con los mismos grupos de poder con el fin de “no combatir la corrupción”.
“Estas ONG se ven al descubierto porque tienen un claro conflicto de interés, ya que dicen trabajar para combatir la corrupción, pero sus directivos se encuentran íntimamente vinculados o relacionados con Juan Orlando Hernández y al Partido Nacional, también están relacionados con el golpe de Estado”, criticó.
A renglón seguido, agregó que también contribuyeron con “el deterioro de las instituciones del Estado, que se traduce en el deterioro de la calidad de vida de los hondureños. Todo ello se evidencia, contundentemente, con la masiva migración que se ha profundizado de todas las clases sociales”.
Otra de las críticas de Redondo se centró en el sector energético, señalando tarifas altas, crisis energética y privatización de los recursos naturales, asegurando que la privatización de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE) fue uno de los principales objetivos de los gobiernos anteriores.
En ese sentido, a criterio del titular del Poder Legislativo , los ciudadanos hondureños continúan enfrentando altos costos por el suministro de electricidad. Del mismo modo, se refirió a los fideicomisos y adjudicación de las ya derogadas Zonas de Desarrollo y Empleo Económico (ZEDE).
“Se profundizó la privatización de nuestros recursos naturales; se privatizó la administración de la hacienda pública o la tesorería del país a través de fideicomisos; se vendió con las ZEDES, nuestro territorio junto con nuestra forma de gobierno y nuestra soberanía. Todo esto, siendo producto del modelo mejor conocido como neoliberalismo, donde unos pocos tienen todo y todos tenemos nada”, agregó.
Crítica contra “grupos de poder económicos”
Las críticas de Redondo giraron en torno a los grupos económicos y políticos que, a su juicio, han intentado deslegitimar el Congreso a través de “mentiras y manipulaciones”.
Según Redondo, estos mismos actores han gobernado Honduras durante décadas, utilizando el “fraude electoral y el abuso del poder para mantenerse en el poder”.
“El bipartidismo y estos grupos poder económicos y políticos que han gobernado en estas últimas décadas en el país, frente a sus continuas derrotas electorales (que solo se pudieron sostener con fraudes electorales) y su predecible derrota en el 2021, ya se habían preparado para ello con bastante antelación, tal como es su costumbre, con la aprobación de leyes, por la fuerza, imponiéndose y valiéndose de la impunidad, pero todo al margen de la Constitución”, aseguró.
Según el presidente del Congreso, el primer intento de estos grupos de poder para subvertir la democracia ocurrió en enero de 2022, cuando trataron de manipular el proceso electoral dentro del Congreso para controlar la Junta Directiva y la presidencia del Legislativo.
“Violentaron la Constitución, los procedimientos, el orden constitucional, sin importarles que ahora todo estaba siendo grabado y, que todo consta en múltiples videos desde distintos ángulos y de diversos medios de comunicación sobre lo que pasó ese día, y, que Constitucionalmente, nosotros, lo que impedimos fue una ruptura del orden constitucional en el Congreso Nacional”, consideró Redondo.
Redondo también acusó a “los grupos de poder” de extender ilegalmente los mandatos de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) y del Fiscal General Adjunto, a pesar de que la Constitución establece plazos concretos para estos cargos.
“A sabiendas que la Constitución ordena tajantemente un plazo cerrado para el ejercicio de estos cargos, pero estos grupos de poder económicos y políticos, aún, cuando ya sabían que estas autoridades habían finalizado dicho plazo o cesado en su cargo”, opinó.
Cabe recordar que el Congreso que preside Redondo se ubica entre los más corruptos a nivel global, según un análisis del Proyecto de Justicia Mundial (World Justice Project).
Llamado a congresistas y sectores
En un llamado a la unidad y a la responsabilidad, Redondo instó a los congresistas, sectores políticos y sociales a dejar de lado “intereses partidarios” y trabajar de manera conjunta por el bienestar de Honduras.
Redondo destacó que, en un momento crucial para el país, es fundamental actuar con patriotismo y responsabilidad para garantizar el progreso y la estabilidad.
“Honduras merece un futuro de progreso y estabilidad. El llamado es claro: dejemos de lado las divisiones políticas, reflexionemos sobre las implicaciones de nuestras decisiones y actuemos con patriotismo por el desarrollo del país y el bienestar de su gente”, concluyó.