TEGUCIGALPA, HONDURAS. -La hondureña María Mendoza Mendoza, alias “La Patrona”, fue condenada por la justicia de Estados Unidos a 10 años de prisión por tráfico de migrantes.
Meses atrás, Mendoza se había declarado culpable ante el juez federal de Tucson, Arizona, Raner C. Collins, de cargos de conspiración para transportar extranjeros ilegales con fines de lucro.
La condena contra “La Patrona” generó la reacción del propio fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland.
“La sentencia de hoy es el último ejemplo del gran trabajo de la Fuerza de Tarea Conjunta Alpha, que lanzamos hace casi tres años para responsabilizar a los grupos de tráfico de personas más prolíficos y peligrosos, y que ha obtenido más de 240 condenas hasta la fecha”, señaló.
Aseveró que “la acusada explotó a migrantes vulnerables para su propio beneficio, arriesgando sus vidas y nuestra seguridad nacional en el proceso. Junto con nuestros socios en todo el gobierno federal, el Departamento de Justicia continuará nuestros esfuerzos para desmantelar y desmantelar redes de tráfico de personas como las que operaba la acusada”.
De su lado, el fiscal federal de Arizona, Gary Restaino, declaró que “la cooperación y la colaboración son herramientas clave para proteger a Estados Unidos del alcance de las organizaciones internacionales de tráfico de personas”.
“Agradecemos a Honduras por su disposición a extraditar, agradecemos a las diversas agencias locales que interceptaron a los migrantes y nos ayudaron a establecer la conexión con una organización más grande, y a todos los socios de la Fuerza de Tarea Conjunta Alpha por desmantelar una red de contrabando”, dijo.
Impacto
Las investigaciones de Estados Unidos revelan que “La Patrona” participó en más de 100 traslado de migrantes ilegales con fines de lucro.
Como cabecilla de una red de tráfico de personas, la hondureña coordinó el movimiento de migrantes de Honduras a la frontera entre Estados Unidos y México y a las casas de seguridad operadas en Phoenix, Arizona, donde los migrantes serían detenidos hasta que pagaran sus tarifas de contrabando.
De acuerdo a las indagaciones, la organización de la hondureña utilizó cuentas de embudo para recaudar millones de dólares en tarifas de contrabando.
“Mendoza ejerció su autoridad dentro de la organización para evaluar sanciones punitivas amenazó con desangrar a un guía como castigo y exigió que un migrante cuya familia no pagara su tarifa de contrabando fuera arrojado de regreso al desierto”, reveló el Departamento de Justicia de Estados Unidos en un comunicado de prensa.
Según documentos judiciales, Mendoza fue una cabecilla de una red de tráfico de personas de alto nivel que, junto con cómplices de Centroamérica, México y Estados Unidos, facilitó la entrada ilegal, el transporte y el refugio numerosos ciudadanos indocumentados a suelo estadounidense.
A través de conversaciones telefónicas capturadas en mensajes interceptados, se alega que Mendoza dirigió el movimiento de los migrantes y el cobro de sus tarifas de contrabando.
La Patrona fue acusada formalmente en enero de 2018 y extraditada hacia Estados Unidos en junio de 2023.
Agravantes
Al determinar la sentencia de Mendoza, el juez Collins encontró que la conspiración involucraba varios factores agravantes, incluido el contrabando de menores no acompañados.
Asimismo, la posesión de un arma de fuego, la creación intencional o imprudente de un riesgo sustancial de muerte y la detención de migrantes mediante coerción o amenaza en relación con una exigencia de pago.
