TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Las muertes por dengue persisten, mientras la Secretaría de Salud (Sesal) sostiene que se está adoptando la logística adecuada para hacer frente a la epidemia y aseguran que todo está bajo control.
La jefa del Programa de Atención de Enfermedades Vectoriales, Amy Tovar, informó que son 21 muertes más por dengue, elevando el total a 81 en lo que va del año.
Anteriormente, las autoridades sanitarias sostenían que eran 60 fallecimientos sospechosos de dengue, de los que 26 fueron confirmados por el Comité de Mortalidad del Dengue.
Con los 21 decesos confirmados recientemente, Honduras se encuentra en una situación crítica, superando las cifras de los años anteriores. El 2023 reportó 49 decesos, cifra que ha sido superada en el primer semestre de este año.
Al observar los últimos tres años, las cifras evidencian que el número de fallecidos aumentó en 80% en el 2024. En 2020 se registraron 10 decesos, en 2021 fueron ocho y en 2022 nueve personas perdieron la batalla.
El 2019 fue el año donde se vivió la peor crisis de dengue en Honduras, con más de 130,000 personas infectadas y 180 muertes.
Hoy, esa cifra parece un amargo presagio de lo que está por venir, mientras el dengue sigue arrebatando vidas a pesar de los esfuerzos realizados.
Los médicos insisten en que las medidas deben centrarse en combatir los criaderos de mosquitos, es decir, se deben intensificar las jornadas de limpieza y fumigación.
“Sin buenos asesores, la Sesal seguirá dando golpes de ciego. El dengue no se espera en los hospitales, se ataca en los criaderos”, cuestionó el doctor Carlos Umaña.