TEGUCIGALPA, HONDURAS.- El primer designado presidencial, Salvador Nasralla, trajo a la memoria pública la renuncia del exvicepresidente Elvin Santos, comparando la dimisión de Santos con su situación actual, en la que no se le ha admitido su renuncia.
En su cuenta de X, Nasralla expuso que en 2008 Santos interpuso su renuncia ante el Congreso Nacional, para así poder competir en las elecciones que se celebrarían un año después.
Mediante el decreto 170-2008, la cámara legislativa, presidida por Roberto Micheletti en aquel entonces, aprobó la solicitud de Santos para abandonar el cargo el 18 de diciembre de 2008.
De acuerdo a las fotografías del documento compartido, la decisión del parlamento se amparó en los artículos 40 y 205 de la Constitución, para permitir que Santos dejara de ser el vicepresidente de la administración de Manuel Zelaya Rosales.
De igual forma, el también líder del Partido Salvador de Honduras (PSH), expuso que es por “miedo y terror” la razón por la que el actual Congreso no ha permitido que Nasralla deje su cargo.
Argumentó que su renuncia no tendría que afectar, porque aún quedarían como designados presidenciales Doris Gutiérrez y Renato Florentino.
Además, le reprochó a la presidenta Xiomara Castro por qué desde que ganaron las elecciones de 2021, ella no ha establecido reuniones de trabajo con él y también señala que tampoco le ha otorgado asignaciones.
Desde la semana pasada las tensiones entre los líderes políticos han crecido, luego de que el presidente del Poder Legislativo, Luis Redondo, ha evitado proceder con la petición de renuncia de Nasralla, quien aspira competir por la presidencia en las elecciones generales de 2025.
Redondo, justificó que no procederían con la renuncia de Nasralla apuntando que se incurriría en delitos imprescriptibles.
Esta situación ha generado polarización en el sector político, teniendo por un bando los que consideran que Redondo está incurriendo en abusos de su poder, y, por otro lado, el oficialismo que respalda la decisión de no admitir la renuncia.
