TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Al ser consultado acerca de la denuncia al Tratado de Extradición, el expresidente Porfirio Lobo Sosa consideró que el gobierno de la presidenta Xiomara Castro tomó una decisión soberana en relación al convenio con Estados Unidos.
Lobo afirmó que no podía dar ninguna opinión, fuera favorable o en contra de la drástica medida, pero indicó que en lugar de proceder a denunciar el tratado hubiera aprobado una Ley de extradición.
“Yo lo que hubiera hecho era aprobar la Ley de Extradición para regular la extradición, no puedo contestar sí o no (si está a favor de la denuncia), pero si el gobierno ha decidido es una decisión soberana del gobierno de la República”, declaró el exmandatario en entrevista con el noticiero Hoy Mismo.
Porfirio Lobo también recordó que cuando era presidente de Honduras lo que se aprobó fue un auto acordado de extradición con Estados Unidos, pero reafirmó que era necesaria una ley para regular el proceso.
Oposición condena denuncia a Tratado
Líderes de oposición en Honduras mostraron su rechazo rotundo a la decisión de la presidenta Xiomara Castro de denunciar el tratado de extradición con Estados Unidos.
El precandidato presidencial por el Partido Liberal, Jorge Cálix, fue uno de los primeros en pronunciarse: “sacaron las uñas. El gobierno de Xiomara Castro ha decidido mandar al carajo la extradición que solo ha servido para que juzguen a los narcos que aquí gozan de impunidad. Con esta decisión están defendiendo a los narcos”.
Cálix advirtió que, si el actual gobierno suspende la extradición, él se compromete a reanudarla en enero de 2026, afirmando que no protegerá a criminales “como lo hace el familión”.
Por su parte, el abogado Rafael Jerez, experto en temas políticos, expresó: “finalmente, se caen las máscaras. La presidenta Xiomara Castro ordena denunciar el tratado de extradición de Honduras con Estados Unidos. Sin duda, buscan aprovechar la diferencia política del pronunciamiento de la embajadora para denunciar un tratado que nada tiene que ver con el impasse político”.
Jerez explicó que, según el tratado, la intención de dar por terminado el acuerdo debe ser comunicada con seis meses de anticipación, lo que podría impedir que criminales, incluidos políticos, sean juzgados en Estados Unidos.
La polémica también alcanzó al Partido Nacional con la opinión de Antonio Rivera, quien calificó la decisión como “increíble” y criticó la falta de tolerancia del gobierno a las críticas, recordando que el combate al narcotráfico fue uno de los principales temas de campaña de Castro.
Rashid Mejía, líder de un movimiento de la sociedad civil, también se mostró crítico: “señora, ya sabíamos que quería eliminar la extradición para favorecerse. Usted fue la primera en felicitar al narcotraficante y dictador Maduro ante el robo de las elecciones. Hoy, manda a su sobrino a reunirse con narcotraficantes, todo tiene sentido”.
Por su parte, el exjefe del Estado Mayor Conjunto de Honduras, Romeo Vásquez Velásquez, fue aún más contundente en su crítica, llamando “hipócritas” a quienes ahora defienden lo que antes condenaban.
“Les duele la verdad; protegen un país narcotraficante y corrupto como Venezuela”, expresó Vásquez Velásquez, aludiendo a la aparente protección que el gobierno hondureño ofrece a regímenes como el de Venezuela.