TEGUCIGALPA, HONDURAS.- A seis días para la convocatoria a los comicios primarios de 2025 el Consejo Nacional Electoral (CNE) todavía no dispone del presupuesto para este proceso, sin embargo, no afecta el llamamiento a la justa democrática a celebrarse seis meses después.
Así lo coincidieron analistas consultados por EL HERALDO, quienes cuestionaron a las principales fuerzas políticas por no lograr todavía consensos para que el órgano electoral disponga de los recursos no solo para las votaciones primarias, sino también para las generales.
El artículo 193 del decreto legislativo 35-2021 contentivo de la Ley Electoral de Honduras establece que “el Consejo Nacional Electoral debe hacer la convocatoria a los partidos políticos a elecciones primarias, seis meses antes del segundo domingo del mes de marzo del año en que se celebren las elecciones”.
Lo anterior implica que el próximo domingo el pleno de consejeros del CNE tiene prevista esta eventualidad que marca el inicio del año electoral.
La consejera presidente Ana Paola Hall será la encargada de dar el banderillazo para este proceso a través de una cadena nacional de radio y televisión, siendo la única que continuará en su cargo al haber resultado reelecta.
Transcurridas 72 horas, dos de los consejeros vacarán en sus funciones para asumirlas los nuevos nombrados, específicamente Marlon Ochoa en representación de Libertad y Refundación (Libre) y Cossette López de parte del Partido Nacional (PN).
Por tal razón, estos días serán clave debido a que Hall junto a las nuevas autoridades del CNE deberán ser juramentadas por el Congreso Nacional al tiempo de buscar un acuerdo político para aprobar los 1,492 millones de lempiras contemplados en el presupuesto electoral.
Deficiencia e inexperiencia
“Lo que veo es deficiencia en términos de gestión, hay bastante inexperiencia, retraso, hay poca eficiencia administrativa. Este debate que se generó con respecto al presupuesto uno no lo entiende porque sabiendo la importancia que tiene el proceso electoral, que es un tema sensible y que produce mucha suspicacia”, manifestó a EL HERALDO el especialista en materia político-electoral, Miguel Cálix.
Aseguró que “si esto hubiera ocurrido en la elección anterior (2021) hubiera habido completa insurrección legislativa, toma de calles; el Congreso ya sabemos que tiene una seria incapacidad de dialogar y es lento para gestionar, el gobierno está más que demostrado con los niveles de déficit de ejecución presupuestaria e inversión hay bastantes retrasos”.
Con especulaciones se llena la población por la ausencia de información de esta dilatoria que no es un problema del actual gobierno, sino del sistema, indicó el entrevistado.
Sostuvo que “lo que si me impresiona es la abulia, la apatía, el no tener la capacidad. Se suponía que la elección anticipada en marzo de los consejeros del CNE era para facilitar la transmisión (de resultados preliminares) no sirvió de nada, ya estamos en septiembre y una cosa sencilla como el presupuesto que es esencial y vital no la pudieron manejar en transición”.
La exhortativa a la clase política es eliminar las dudas al igual que generar confianza en la autoridad electoral desde el Poder Legislativo, reiteró Cálix.
Conflicto de interés
Por otro lado, el rol que desempeñará Rixi Moncada a lo interno de Libre no solo como aspirante a un cargo de elección popular y ahora como titular de la Secretaría de Defensa genera una percepción de conflicto de interés, consideró el experto en política, Lester Ramírez en una entrevista concedida a este rotativo.
Planteó que “se está creando una percepción y esta va a ir desarrollándose más y más a medida que la abogada Rixi Moncada tenga que manejar dos sombreros a la vez, uno como precandidata y aspirante presidencial y otro como alta funcionaria; esa percepción va a ser muy difícil de desvanecerla, una percepción de conflicto de interés y que va a afectar en la confianza que hay en los militares”.
“No simplemente va a ver un efecto hacia ella o el partido Libre, sino también un efecto de rama hacia las Fuerzas Armadas y eso creo que es algo que más bien los militares van a tener que manejar de ahora en adelante”, destacó el también catedrático.
El expresidente del otrora Tribunal Supremo Electoral (TSE), Augusto Aguilar, declaró que desde la perspectiva ética el nombramiento de Moncada en la administración pública “no es lo mejor que un alto funcionario que de alguna manera genera especulaciones e inconvenientes por la desconfianza precisamente que es el factor común en torno a estos partidos, líderes y candidatos; entonces lo que puede surgir que pueda tener la creencia que la abogada Rixi Moncada, aprovechándose de su cargo pueda utilizar las influencias o recursos del Estado para favorecerse”.
