TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Luego de una larga problemática entre el Sindicato de Trabajadores y las autoridades del Instituto Nacional de Formación Profesional (Infop), este día se conoció que el abogado, Fredis Cerrato, que hasta ahora fungía como director ejecutivo de la institución, presentó la renuncia a su cargo.
La salida del funcionario se da tras varias jornadas de protesta y una profunda crisis, protagonizada por los miembros del Sindicato de Trabajadores del Infop (SatraInfop), quienes se tomaron las instalaciones haciendo una serie de demandas.
Los sindicalistas aducían que las contrataciones laborales realizadas por Cerrato no cumplían con el perfil profesional idóneo para desempeñar dichos cargos. Además, solicitaron la retención de los capacitadores que actualmente trabajan en el instituto.
Precisamente por eso, también solicitaron que las 200 plazas que presuntamente existen, sean asignadas a través de un concurso donde los aspirantes demuestren estar aptos.
Ante esto, el ahora exdirector, Fredis Cerrato, reaccionó declarando que el “sindicato quiere quedarse con el manejo administrativo de las plazas”.
Sumado a ello, Cerrato expresó que no se le podía limitar a contratar solo gente de Libre, no sin antes dejar claro que el no inducía a miembros de ningún colectivo a enfrentarse a los manifestantes.
“No doy instrucciones a ningún colectivo, mi posición es dirigir y administrar el Infop y en eso estoy empeñado. El problema se origina con un sindicato que ha venido desde hace 40 años negociando plazas laborales, a tal grado que la mayor amenaza de la institución son los salarios altísimos que tienen algunos miembros del sindicato”, apuntó.
Hasta ahora Fredis Cerrato no se ha pronunciado públicamente sobre su renuncia.
Fuerte altercado
Cabe destacar que durante las protestas, se dio un fuerte altercado entre los empleados de la institución, agentes policiales y los colectivos de libre, quienes llegaron al lugar con la intención de desalojar a los manifestantes alegando que no podían violentar con su protesta el derecho a la educación de los alumnos del centro técnico.
Además, reclamaban que, a su juicio, la manifestación ocurrió para desestabilizar el gobierno de Xiomara Castro.
Sumado a ello, los integrantes de los colectivos exigieron a quienes mantenían la toma, identificarse con el censo que los acredita como miembros de Libre, ya que aseguraron, que estas protestas son impulsadas por nacionalistas que aún continúan en plazas gubernamentales, donde según ellos, no deben estar tras el triunfo de Castro en noviembre de 2021.
Los ánimos se exasperaron y la situación comenzó a tornarse violenta, llegando a ser necesaria la intervención de elementos de la Policía Nacional, dando como resultado la agresión a uno de los uniformados.
Finalmente, la policía pudo dispersar a los manifestantes y retomar el control en el lugar.