TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Por la picada de un zancudo Aedes aegypti, otros dos menores de edad perdieron la vida.
Ellos pudieron ser doctores, abogados, ingenieros, biólogos o cualquier otra profesión que le aportara al país.
Sin embargo, un insecto que transmite el virus del dengue les truncó la vida y los sueños.
Se trata de un niño de 12 años del municipio de Tocoa, Colón, quien llevaba seis días con la enfermedad.
El menor fue atendido inicialmente en una clínica privada, pero se complicó y el miércoles fue trasladado al Hospital General San Isidro donde falleció por la hemorragia que presentó por dengue grave y falleció de dos paros cardiacos.
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La directora del Hospital San Isidro, Delmis Vilorio, manifestó que pese a que se han habilitado más espacios para atender pacientes y han contratado más personal no se dan abasto por la alta incidencia de afectados con la enfermedad viral.
El menor iba a ser trasladado al Hospital Mario Catarino Rivas de San Pedro Sula para brindarle el tratamiento, pero no resistió, la enfermedad está siendo muy severa y los menores de edad son las principales víctimas.
La otra víctima mortal se registró en El Progreso, Yoro, siempre en la zona norte del país. Una niña de seis años no resistió la complicación del virus, dengue grave, y falleció. El padre de la menor afirmó con dolor que su pequeña estaba a punto de cumplir siete años.
Así como ellos toda una gran generación de menores de edad y que tenían un gran futuro por delante dejaron de existir por la culpa de un zancudo Aedes aegypti.
Las autoridades sanitarias reportan un total de 48 defunciones confirmadas por laboratorio a causa de dengue grave. Asimismo, otras 39 víctimas mortales aún están pendientes de confirmarse. A diario ingresan decenas de pacientes a los hospitales públicos del país.
