Un espeluznante hallazgo mantiene perplejos y horrorizados a los habitantes de San Nicolás, Santa Bárbara, en el occidente de Honduras.
En el crematorio municipal de este poblado se encontró el viernes el cuerpo de un bebé completamente calcinado, enmedio de la ceniza y los restos de basura.
Según medios de comunicación locales, el horrendo crimen lo cometió la desnaturalizada madre de la pequeña criatura de días de nacido.
Dos testigos, citados por un canal televisivo, aseguran haber visto a la mujer cuando iba con el recién nacido metido en una bolsa y que incluso alcanzaron a oír el incesante llanto.
Después, la madre lo escondió en el crematorio y lo roció de gasolina para que ardiera en llamas, relataron. Se presume que el cuerpo calcinado fue encontrado por dos pepenadores.
Agentes de la Policía Nacional y Medicina Forense llegaron a la escena para el levantamiento del cadáver y recopilar información del espantoso crimen.
En marzo del 2015 se detuvo a una mujer por haber intentado deshacerse de su bebé al lanzarlo por una letrina en el sur de Honduras.