Juticalpa, Honduras
En plena temporada de producción de sandía, en los mercados y negocios de Juticalpa está escasa la fruta de verano.
Y es que su cultivo era la alternativa que sostenía a cientos de familias en Olancho, pero este año es uno de los peores para los productores.
Lo poco rentable que resulta la siembra de granos básicos los llevó a renovar sus fincas a fin de obtener sandía en cantidad y calidad para abastecer los mercados nacionales, sin embargo casi todo se perdió y no hay fruta ni para el mercado local. En los centros de abasto se comercializa fruta traída de El Paraíso.
En las comunidades de La Concepción, San Marcos, Las Tablas, Punuare y Río Tinto cada año se cultivaban centenares de manzanas cuya fruta se distribuía a nivel nacional y un alto porcentaje era vendido a comerciantes de la República de El Salvador.
Sin embargo, Juan Pablo Contreras, productor de La Concepción, explicó que la irregularidad de la época lluviosa y la presencia de plagas como los afidos, ácaros, trips, gusano perforador y raspador, así como la falta de asistencia técnica, dañó la producción.
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Varios productores abandonaron sus sembradíos en pleno crecimiento por estar infectado y no poseer la capacidad de desinfectarlos cada dos días.
“De 100 manzanas de sandía que se sembraban, en el presente año únicamente se plantaron 35”, informó. La inversión para la siembra y cultivo de una manzana de sandía es de 40 mil lempiras y al existir buena cosecha se adquiere un promedio de 60 mil, confirmó Contreras.
El titular de Dicta, Omar Sarmiento, exclamó con preocupación que los dedicados al cultivo de sandía deben organizarse y asignarles personal técnico para buscar soluciones a la crisis en el rubro.
