Tegucigalpa, Honduras
Obtener material fílmico de la historia del país no es tarea fácil, por ello la necesidad de rescatar este patrimonio que será el legado de generaciones.
Bajo esa premisa nació la idea de un proyecto que en 2014 se materializó bajo el lema “La memoria de hoy es la memoria del mañana” y el nombre de Cinemateca de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras “Enrique Ponce Garay”.
La iniciativa surgió de la pasión del cineasta de origen francés René Pauck, quien ha dedicado la mayor parte de los 40 años que tiene de vivir en Honduras a investigar y recopilar esas producciones cinematográficas del país que datan de los años 20, 50, 70, 80 y 90.
La Cinemateca de la UNAH, ubicada en el tercer piso del edificio de la biblioteca, en el pasillo que conduce hacia las antiguas oficinas de la rectoría, es el espacio que guarda parte de esa historia del cine de Honduras y otros hechos que han marcado la vida política, social y cultural del país.
Pauck contó a EL HERALDO que “desde hace muchos años tengo esa idea de salvar el patrimonio audiovisual de este país, pero no se había podido lograr”, y recordó que hace algunos años hizo un intento de llevar a cabo este propósito con una fundación y con el Ministerio de Cultura, Arte y Deportes, pero “desgraciadamente en 2009, cuando estábamos empezando a construir una bóveda de la videoteca, se dio el golpe de Estado y la idea se cayó”.
Acercamiento
En 2014, el francés con corazón de hondureño volvió a pensar qué hacer con todo ese material “increíble” que tenía y comenzó a hacer los acercamientos necesarios para poder realizar su proyecto.
Fue así que, sabiendo que la rectora de la UNAH, Julieta Castellanos, es una gran aficionada al cine, hizo la propuesta.
“Fue en ese momento que con ella tuvimos un acercamiento para crear una fundación de cine y estuvo anuente a participar en esa experiencia”, dijo Pauck.
El creador, siempre con la mirada puesta en el ambicioso proyecto, pensó en que al asumir Castellanos un segundo período, iba a interesarse en montar la cinemateca.
Primero consultó a uno de los asesores en comunicación de la rectora, quien le consiguió una cita que desembocó en la posterior puesta en marcha del proyecto.
“La rectora me dijo: hay que iniciar el proyecto, hay un espacio en el Centro de Arte y Cultura (CAC) en Comayagüela para que pueda instalar la cinemateca y empiece a rescatar ese material, después veremos qué vamos a hacer”, detalló.
La primera actividad que realizaron desde la naciente Cinemateca de la UNAH fue un homenaje a Sami Kafati el 9 de julio de 2014. “Esa actividad nosotros hoy la identificamos como el nacimiento de la Cinemateca ‘Enrique Ponce Garay’”, expresó.
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Inicios
Seis personas que forman parte del equipo de la cinemateca universitaria se quedaron un año y medio en el CAC recopilando el material, haciendo acopio de fondos cinematográficos como el de Sami Kafati, Fosi Bendeck y el Fondo Guilbert, que tenía el Instituto Hondureño de Antropología e Historia (IHAH), el cual es considerado de mucho valor porque rescata imágenes de los años 50, y que actualmente está resguardado en la Cinemateca de la UNAH.
En la colección fílmica que se ha logrado rescatar “encontramos un tesoro, que son los eventos sociales y políticos de Honduras, aquí cito algunos como el Miss Honduras de 1969 y el discurso de Oswaldo López Arellano de 1963; es una cantidad de material en el que se encuentra el memorial del siglo XX, que es solamente un compendio de lo que tenemos”, contó René Pauck.
También están un documental sobre Juan Manuel Gálvez de la visita que realizó a Gracias, Lempira.
Entre las películas que custodia este proyecto está “Mi amigo Ángel”, de Sami Kafati, que es la película que marca el arranque del cine en Honduras. También está la cinta “No hay tierra sin dueño” y el ensayo de Fosi Bendeck “El reyecito o el mero mero”.
“Todas esas cosas y otras que nos vienen cada día representan un fondo audiovisual increíble, que ya constituye una memoria de lo que aconteció en nuestro país Honduras”, destacó Pauck, que a corto y mediano plazo pretende digitalizar todo el material fílmico que se ha logrado recopilar y unir esfuerzos con otros países a través de una red de cinematecas de la región centroamericana, entre las que se encuentran las de países como Guatemala, Costa Rica y México.
“La idea es formar una unidad centroamericana, una organización de los archivistas cinematográficos y las cinematecas”, enfatizó.
