Tegucigalpa, Honduras
Las personas diabéticas y con hipertensión arterial son las principales víctimas mortales que ha cobrado la influenza A H1N1 en el país.
Las autoridades sanitarias reportan 10 personas fallecidas confirmadas por laboratorio a causa de ese virus, que les complicó la enfermedad crónica que ya tenían. Cinco son hombres y cinco mujeres.
Del 24 de abril al 10 mayo, es decir en 17 días, perdieron la vida nueve personas. Mientras que la primera muerte que se registró este año fue el 3 de febrero en un hospital privado de la capital y era originario de Choluteca.
Cinco de las víctimas eran de Tegucigalpa, dos de Choluteca, dos de Yoro y una de San Pedro Sula. Las autoridades registran 137 casos.
Diana Núñez, jefa de la unidad de Vigilancia de la Salud, comentó que “los dos últimos fallecimientos fueron en el Hospital Mario Catarino Rivas, son personas que tienen antecedentes de base de diabetes mellitus”.
Una de las víctimas es una mujer de 56 años de San Pedro Sula y un hombre de 46 años procedente de Yoro.
Muertos por influenza
En 2017 de la influenza tipo A H1N1 se reportaron cero casos y cero víctimas mortales, mientras que de la variable A H3N2 hubo dos fallecimientos y 60 casos. A pesar de que son variables diferentes, se colige que las víctimas mortales por influenza se han quintuplicado en tan solo cuatro meses y medio en referencia a los de 2017.
Las autoridades llaman a las poblaciones vulnerables a vacunarse. “El llamado a la población es que incremente las medidas de prevención, sobre todo en los grupos en riesgo, que son personas desde seis meses a 59 años con enfermedades crónicas como diabetes, cáncer, VIH/sida, tuberculosis, pacientes renales”, dijo Núñez.
También son vulnerables las embarazadas, los adultos mayores y los menores de cinco años. A partir del 14 de mayo se comenzará a vacunar a las poblaciones en riesgo en Tegucigalpa, San Pedro Sula y Cortés