COLORADO, ESTADOS UNIDOS.- Desesperada se encuentra una madre hondureña tras la muerte violenta de su hijo de 20 años y varios miembros de su familia en Aurora, Colorado, Estados Unidos.
Kenneth Green Luque, quien era un ciudadano estadounidense de ascendencia hondureña, falleció en una masacre en la que también perdió la vida su esposa, su suegro y un vecino.
El 30 de octubre de 2022 el joven se encontraba al interior de su vivienda, cuando un hombre identificado como Joseph Castorena (21) ingresó violentamente y les disparó en reiteradas ocasiones, quitándoles la vida de inmediato.
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Las otras víctimas respondían a los nombres de Mariana Cerrano (22), hermana gemela de la expareja del hechor y esposa de Kenneth; Jesús Cerrano (51), padre de las jóvenes y suegro de Kenneth; y el vecino Rulfo Salgado Pérez (49).
Al momento del mortal ataque también se encontraban dentro de la vivienda las dos pequeñas hijas de Mariana y el hondureño, quienes tienen casi dos años y 10 meses y afortunadamente salieron ilesas, pero perdieron a sus padres y abuelo en el hecho violento.
Se cree que Castorena, quien ya tenía una orden de restricción, buscaba a su expareja, quien era cuñada de Kenneth y quien había llegado a vivir con ellos intentando huir de su excompañero de hogar, pero este, negándose a aceptar el fin de la relación, la buscaba insistentemente.
Según versiones preliminares, Mariana le habría pedido a su hermana que se escondiera en el baño para no ser vista por su agresor y por eso ella sobrevivió.
El sospechoso permanece prófugo de la justicia y las autoridades han emitido una alerta de búsqueda en su contra. Dos presuntos cómplices de Castorena, uno de ellos identificado como Carlos Casillas-Flores, de 22 años, fueron detenidos en los últimos días, acusados de ayudarle a escapar para evadir a las autoridades.
Piden ayuda para repatriar a Kenneth
Cuando Suyapa Luque se enteró de la muerte de su hijo y que sus nietas quedaron sin sus padres el mundo se le derrumbó, además, desde entonces la consume la impotencia de no poder darle sepultura a su vástago.
“Quiero justicia para mi hijo, no lo vi en vida, no voy a ver ni siquiera el cuerpo, por lo menos aquí lo quiero tener en un cementerio y sabré que él está ahí.. Pero (estando) tan lejos”, lamentó la acongojada madre en una entrevista.
Y sobre sus nietas dijo que “me está destrozando el alma no saber de ellas... Yo no sé dónde están, solo sé que están resguardadas”, pues aparentemente, fueron enviadas a un centro de cuidado de menores del Estado.
Si usted desea colaborar para repatriar los restos del joven Kenneth Green puede hacerlo donando a través de la cuenta de GoFundMe que abrieron sus familiares, dando click aquí.