COAHUILA, MÉXICO.- Un migrante hondureño perdió la vida de manera trágica mientras intentaba alcanzar el “sueño americano”.
Luis Antonio Fiallos, de 53 años, falleció en el Bravo en Piedras Negras, Coahuila, México. Apenas unos kilómetros lo separaban de la tierra en la que soñaba conseguir mejores oportunidades para él y su familia.
Según la información de algunos medios mexicanos, el hondureño caminaba junto a su hijo, con quien planeaba llegar a Estados Unidos de manera ilegal a través de la frontera con el mencionado sector cuando se desplomó, tras un aparente ataque cardíaco y no volvió a reaccionar.
Otros medios aseguran que Fiallos pereció ahogado tras caer al embravecido río, sin embargo, ninguna de las versiones ha sido confirmada por las autoridades hasta este momento.
Luis Fiallos, de 22 años, quien es hijo del fallecido fue quien emitió gritos de auxilio a las autoridades mexicanas que recorrían la zona, por lo que miembros del Grupo Beta de rescate se desplazaron al sector, pero a pesar de los esfuerzos, no lograron reanimar al catracho.
Una desgarradora imagen tomada por el medio Zócalo muestra al joven sentado a la orilla del río y con un semblante de dolor, mientras a su espalda yace el cuerpo de su padre, el cual fue cubierto con una manta a la espera de su levantamiento. La situación para Luis Fiallos hijo es incierta, pues ahora deberá gestionar la repatriación del cuerpo de su progenitor y se desconoce qué decisión se tomará con respecto a su permanencia irregular en México.
Este se convierte en el séptimo hondureño fallecido en menos de 15 días en suelo mexicano, luego de que el pasado lunes 27 de marzo, seis compatriotas perdieran la vida en un incendio dentro de un centro de detención en Ciudad Juárez.
