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Dan por muerto al niño arrastrado por un caimán en Florida

Los buscadores, equipados con sonar, recorren un sistema de lagos y lagunas encadenados por canales a la laguna Seven Seas

15.06.2016

Florida, Estados Unidos
Medio centenar de personas 'se esfuerzan por recuperar el cuerpo' de un niño de dos años arrastrado al agua por un caimán en Walt Disney World, dijo el comisario del condado de Orange, Jerry Demings.

La familia 'sin duda perderá a un niño de dos años', dijo el jefe policial, y añadió que se trata de 'darle alguna clase de consuelo a la familia'.

Los buscadores, equipados con sonar, recorren un sistema de lagos y lagunas encadenados por canales a la laguna Seven Seas, donde el caimán atacó al niño que chapoteaba en el agua el martes por la noche.

Por su parte, la empresa Disney anunció el cierre de todas las playas en sus centros vacacionales del lago Buena Vista.

La familia de cinco miembros de Nebraska, de vacaciones en el Grand Floridian Resort & Spa, caminaba por la laguna Seven Seas pasadas las 9 de la noche del martes cuando se produjo el ataque en una zona donde había carteles de 'prohibido nadar', dijo Demings en conferencia de prensa. El padre trató de rescatar al niño pero no pudo, añadió.

Se calcula que el caimán medía entre 1,2 y 2,1 metros (entre 4 y 7 pies), pero no se sabía con exactitud, dijo Demings. El padre sufrió cortes y magulladuras.

La playa es parte del Grand Floridian, al otro lado del lago del parque Magic Kingdom de Disney.

Nick Wiley, de la agencia de vida silvestre y acuática de Florida, dijo que los ataques de caimanes son inusuales, pero que las criaturas se desplazan mucho. Añadió que se atrapó y sacrificó cuatro caimanes durante la noche, pero se determinó que ninguno era el que se buscaba.

Williamson dijo que el niño se encontraba en el agua a menos de un metro de la orilla cuando lo atacó el caimán.

La vocera de Disney, Jacquee Wahaler, dijo que todos en el centro vacacional estaban afligidos por el suceso y que la empresa estaba ayudando a la familia.

Preguntada si la empresa sabía de la presencia de caimanes en la propiedad, Wahaler respondió que había carteles de 'prohibido nadar'.