El grupo Estado Islámico difundió el viernes un video en el que se ve a uno de sus combatientes decapitando al rehén británico Alan Henning y amenazando con matar a otro prisionero estadounidense, el cuarto asesinato de este tipo que perpetra esa organización extremista, que ha sido blanco de ataques aéreos comandados por Estados Unidos.
El video es similar a otros sobre decapitaciones grabados por el grupo Estado Islámico, que ahora controla amplios territorios a lo largo de la frontera entre Siria e Irak.
El video termina con un combatiente de Estado Islámico que amenaza a un hombre al que identifica como el estadounidense Peter Kassig.
Dos funcionarios estadounidenses, que solicitaron el anonimato porque no estaban autorizados a hacer declaraciones, confirmaron que el grupo Estado Islámico tienen como rehén a Kassig. Declinaron abundar en detalles.
'Obama, usted ha iniciado su bombardeo aéreo de Shams (Siria), que sigue golpeando a nuestro pueblo, así que es apenas correcto que nosotros ataquemos el cuello de su gente', dice un miliciano enmascarado.
The Associated Press no pudo verificar de inmediato la autenticidad del video, aunque fue divulgado de la misma manera que otros vídeos del grupo Estado Islámico y el enmascarado se escuchaba similar al que perpetró las demás decapitaciones.
En un comunicado, la oficina de Relaciones Exteriores del Gran Bretaña dijo que intentaba comprobar la veracidad del contenido del video.
'Si es cierto, se trata de otro asesinato vergonzoso', según el comunicado. 'Estamos dando todo el apoyo posible a la familia (de Henning); ésta ha pedido que se le deje en paz en este momento', agregó.
Gran Bretaña apoya la campaña militar de Estados Unidos contra el grupo Estado Islámico; las fuerzas británicas contribuyen con logística y compilación de inteligencia, y más recientemente participan en los ataques aéreos contra esa organización en Irak.
Este es el cuarto video de una decapitación que divulga el grupo Estado Islámico. Las decapitaciones no se muestran por completo en los videos, pero el miliciano, que habla inglés con acento británico, sostiene un cuchillo largo y parece degollar a las tres víctimas: los reporteros James Foley (estadounidense) y Steven Sotloff (estadounidense-israelí) y el trabajador británico de asistencia humanitaria David Haines.
Henning, de 47 años, apodado 'Gadget', se había unido a una caravana de ayuda y fue secuestrado el 26 de diciembre, poco después de haber cruzado la frontera entre Turquía y Siria.
A comienzos de esta semana, la esposa de Henning, Barbara Henning, había rogado por televisión a los milicianos: 'Por favor libérenlo. Lo necesitamos de regreso en casa'.
Decenas de líderes musulmanes en Gran Bretaña solicitaron al grupo Estado Islámico que dejaran en libertad a Alan Henning.
La esposa de Henning había dicho que tenía esperanzas sobre la suerte de éste ante 'las protestas en todo el mundo'.
Mohamed Shafiq, director ejecutivo de la Fundación Ramadán, un grupo islámico de caridad, describió a Henning como 'un héroe británico'.
'El asesinato bárbaro de Henning es un atentado contra todas las personas decentes en el mundo', agregó.