Un juez brasileño ordenó este viernes devolver el pasaporte al expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, que le había sido incautado la semana pasada después que un tribunal ratificara su condena a más de 12 años de cárcel por corrupción.
La decisión de segunda instancia deja sin efecto el fallo de una corte inferior de Brasilia, que le había prohibido a Lula (2003-2010) salir del país para evitar una supuesta fuga, horas antes de que embarcara en un vuelo a Etiopía para una reunión de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
El viaje fue cancelado y el pasaporte entregado a la policía.
'No hay cómo concluir que [Lula] pretendiese fugarse del país con la finalidad de impedir la aplicación de nuestra ley penal. Por el contrario, se percibe en su conducta el cuidado de demostrar, sobre todo al poder judicial, que su salida del país estaba justificada por un compromiso profesional previamente agendado', escribió el juez Bruno Apolinário, en la capital brasileña.
'Solamente con un gran ejercicio de imaginación se podría llegar a la conclusión proferida en la decisión [de primera instancia]', añadió en el texto al que accedió la AFP.
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Lula fue condenado en 2017 a casi 10 años de prisión por recibir un apartamento a cambio de favorecer a una constructora involucrada en la red de sobornos de Petrobras.
Ese fallo fue confirmado el miércoles pasado por el Tribunal Regional Federal 4 de Porto Alegre (TRF4), que además de ampliar la pena a 12 años y un mes de detención, dejó la candidatura presidencial de Lula en la cuerda floja cuando lidera los sondeos para las elecciones de octubre.
Y también podría llevarlo a prisión.
Los fiscales que solicitaron el decomiso de su pasaporte argumentaron que Lula estaría en condiciones de solicitar asilo en algún país sin tratado de extradición con Brasil, ante el peligro 'real e inminente' de que perdiese su libertad.
La sentencia del TRF4 indica que la pena solo podría ser ejecutada una vez agotados todos los recursos de apelación, lo que demorararía varias semanas o meses.
'La decisión proferida hoy por el Tribunal Regional Federal de la primera Región corrige una violación contra la garantía constitucional de ir y venir que había sido impuesta indebidamente al expresidente Lula por la Justicia Federal de Brasilia', dijo Cristiano Zanin Martins, abogado del exmandatario en una nota.