El acuerdo alcanzado por países centroamericanos y México sobre un plan piloto para ayudar a los migrantes cubanos varados en Costa Rica es un 'paso de gigante' para resolver su situación, estimó este martes el secretario general de la OEA, Luis Almagro.
'La situación humanitaria de los migrantes cubanos requería una solución rápida e integral, y este acuerdo la facilita. Hay que felicitar los esfuerzos diplomáticos de los países implicados, porque han dado un paso gigante', expresó el diplomático uruguayo.
Por ese entendimiento, se pondrá un práctica un plan piloto para trasladar a territorio mexicano a miles de esos migrantes ya en la primera semana de enero próximo.
El Ministerio de Relaciones Exteriores costarricense detalló que los migrantes cubanos, entre 5.000 y 7.000, viajarán 'desde Costa Rica vía aérea hacia El Salvador' y de ahí en autobús a través de los territorios de Guatemala y México hacia Estados Unidos, su destino final.
La cancillería costarricense explicó que los cubanos financiarán su transporte aéreo hasta El Salvador y garantizó que el paso de los isleños a través de Centroamérica será un proceso 'seguro, ordenado y documentado'.
Ambas cancillerías mantuvieron reserva sobre el número de cubanos que se incluirán en el plan piloto y otros detalles operativos, que deberán ser consultados con las autoridades de cada país.
De acuerdo con Almagro, 'los migrantes tienen los mismos derechos que otros ciudadanos', y que esos derechos son válidos con independencia de la situación administrativa en la que se encuentren.
Los cubanos permanecen en 37 albergues en la zona norte del país, donde reciben alimentación, atención médica y otros apoyos, pero el coste económico se ha hecho insostenible para Costa Rica, así como la frustración para los migrantes.