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Lula quiere dejar “cuestiones geopolíticas” fuera de agenda del G20

También anunció que la próxima cumbre del G20 será en noviembre de 2024 en Rio de Janeiro
10.09.2023

NUEVA DELHI, INDIA.- El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, asumió el domingo la presidencia del G20 con un llamado a evitar que “cuestiones geopolíticas secuestren la agenda” del bloque, señalando su oposición a discutir el conflicto en Ucrania.

“No podemos dejar que cuestiones geopolíticas secuestren la agenda de discusiones del G20”, expresó Lula en el cierre de la cumbre de dos días en Nueva Delhi.

“No nos interesa un G20 dividido (...) Necesitamos paz y cooperación en vez de conflicto”, añadió, al asumir la presidencia temporal del bloque de manos del primer ministro indio, Narendra Modi.

También anunció que la próxima cumbre del G20 será en noviembre de 2024 en Rio de Janeiro.

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Lula tocó el tema un día después de que el grupo de las 20 grandes economías emitiera una declaración final en la cual evitó criticar a Rusia por la invasión a Ucrania, un reflejo de la falta de consenso en el bloque sobre el tema.

Estados Unidos y algunos países europeos querían una condena a Moscú pero no hubo consenso, incluso sobre la presencia de Rusia en la cumbre.

El presidente ruso, Vladimir Putin, no participa en la cita de Nueva Delhi, donde fue representado por su ministro de Relaciones Exteriores, Serguéi Lavrov.

El pronunciamiento del G20, dado a conocer la noche del sábado, al final del primero de los dos días de la cumbre, denunció el uso de la fuerza para lograr ganancias territoriales, pero evitó criticar directamente a Rusia por la invasión lanzada en febrero de 2022.

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En una entrevista la noche del sábado con la televisión india Firstpost, Lula afirmó que la guerra en Ucrania no debe formar parte de la agenda del G20, que debe estar centrado en temas sociales y económicos.

Aseguró también en esa entrevista que Putin será invitado a la cumbre del G20 en Brasil y que no será detenido, pese a la orden de arresto en su contra emitida por la Corte Penal Internacional (CPI) en marzo pasado por crímenes de guerra.

En su discurso al cierre de la cumbre de Nueva Delhi, Lula dio a conocer las tres prioridades de la agenda brasileña del G20: la lucha contra la desigualdad y el hambre, el combate contra el cambio climático y la reforma de las instituciones de gobernanza internacional.

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Acción climática

Sobre el último punto de la agenda, insistió en su llamado a que más países integren el Consejo de Seguridad de la ONU y que las naciones en desarrollo tengan más voz en el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial.

Pero el tema que ha dominado la agenda de Lula en la cumbre de India ha sido el llamado a la acción contra el cambio climático, con un advertencia de que el mundo enfrenta una “emergencia climática sin precedentes”.

Sin embargo, la declaración final de Nueva Delhi aborda el tema de manera tan básica que resultó aceptable tanto para los países que defienden la eliminación gradual de los combustibles fósiles como por los grandes productores de petróleo y carbón, como Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos y Rusia.

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Pese a la declaración poco ambiciosa, los participantes de la cita calificaron la cumbre de India como un “éxito”.

En particular, el ministro ruso Lavrov destacó como una conquista que “logramos impedir el intento occidental de ‘ucranizar’ la agenda de la cumbre”.

El funcionario indio Amitabh Kant, uno de los organizadores de la cumbre, comentó el sábado que Brasil ayudó a forjar el acuerdo sobre Ucrania en la declaracion final, que calificó como “la parte más compleja” de la declaración”.

Lula agradeció a Modi la organización de la cumbre, que calificó como “exitosa” e hizo votos por organizar la próxima reunión “por lo menos igual” a la de Nueva Delhi.

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