Caracas, Venezuela
La oposición venezolana desestimó este viernes la oferta del presidente Nicolás Maduro de un 'diálogo nacional' tras las elecciones legislativas del próximo 6 de diciembre.
Maduro 'no está calificado política ni moralmente para hacer ninguna convocatoria de diálogo después de años de haberlo interferido', dijo a la AFP Jesús Torrealba, secretario ejecutivo de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), que aglutina a los partidos de oposición.
Para el dirigente, 'el escenario de encuentro nacional será el nuevo poder legislativo' que emergerá el 6 de diciembre cuando, según él, la oposición logre la mayoría en la Asamblea por primera vez en la era chavista.
El jueves, durante una entrevista televisiva, Maduro anunció que luego de los comicios convocará a todos los diputados electos, incluidos los de la MUD, 'a un diálogo nacional en el palacio de Miraflores en función de los grandes objetivos de desarrollo del país' para el período 2016-2018.
Integrada por una treintena de partidos de varias tendencias, la MUD lidera la intención de voto, según varias encuestas, aunque el oficialismo cita otros estudios que lo dan como favorito.
El mandatario socialista, elegido para el período 2013-2019, descartó que la coalición opositora pueda ganar la mayoría parlamentaria, pero ante esa hipótesis manifestó que Venezuela 'entraría en una de las más turbias y conmovedoras etapas de su vida política'.
En ese perspectiva 'nosotros defenderíamos la revolución, no entregaríamos la revolución y la revolución pasaría a una nueva etapa', añadió, indicando que gobernaría en 'unión cívico militar', una alianza a la que exhorta en casi todos sus discursos.
'Con la Constitución en la mano echaremos adelante la independencia de Venezuela cueste lo que cuente, como sea', sostuvo Maduro.
Torrealba consideró esas palabras como una 'agresión' y una 'amenaza' que 'descalifican' al heredero político del fallecido presidente Hugo Chávez (199-2014) como citante a un diálogo. 'Forma parte de su bipolaridad extrema', dijo.
La analista política Mercedes Pulido opina que la propuesta del gobernante apuntaría a satisfacer expectativas divergentes al interior del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), entre quienes 'no quieren entregar la revolución' y los que ven la 'necesidad de una transición con diálogo', declaró a la AFP.
De ese modo, Maduro, con una baja popularidad según los sondeos, buscaría afianzar su liderazgo. '¿Pero qué capacidad tiene de arbitraje?', se pregunta Pulido.
La oposición venezolana desestimó este viernes la oferta del presidente Nicolás Maduro de un 'diálogo nacional' tras las elecciones legislativas del próximo 6 de diciembre.
Maduro 'no está calificado política ni moralmente para hacer ninguna convocatoria de diálogo después de años de haberlo interferido', dijo a la AFP Jesús Torrealba, secretario ejecutivo de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), que aglutina a los partidos de oposición.
Para el dirigente, 'el escenario de encuentro nacional será el nuevo poder legislativo' que emergerá el 6 de diciembre cuando, según él, la oposición logre la mayoría en la Asamblea por primera vez en la era chavista.
El jueves, durante una entrevista televisiva, Maduro anunció que luego de los comicios convocará a todos los diputados electos, incluidos los de la MUD, 'a un diálogo nacional en el palacio de Miraflores en función de los grandes objetivos de desarrollo del país' para el período 2016-2018.
Integrada por una treintena de partidos de varias tendencias, la MUD lidera la intención de voto, según varias encuestas, aunque el oficialismo cita otros estudios que lo dan como favorito.
El mandatario socialista, elegido para el período 2013-2019, descartó que la coalición opositora pueda ganar la mayoría parlamentaria, pero ante esa hipótesis manifestó que Venezuela 'entraría en una de las más turbias y conmovedoras etapas de su vida política'.
En ese perspectiva 'nosotros defenderíamos la revolución, no entregaríamos la revolución y la revolución pasaría a una nueva etapa', añadió, indicando que gobernaría en 'unión cívico militar', una alianza a la que exhorta en casi todos sus discursos.
'Con la Constitución en la mano echaremos adelante la independencia de Venezuela cueste lo que cuente, como sea', sostuvo Maduro.
Torrealba consideró esas palabras como una 'agresión' y una 'amenaza' que 'descalifican' al heredero político del fallecido presidente Hugo Chávez (199-2014) como citante a un diálogo. 'Forma parte de su bipolaridad extrema', dijo.
La analista política Mercedes Pulido opina que la propuesta del gobernante apuntaría a satisfacer expectativas divergentes al interior del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), entre quienes 'no quieren entregar la revolución' y los que ven la 'necesidad de una transición con diálogo', declaró a la AFP.
De ese modo, Maduro, con una baja popularidad según los sondeos, buscaría afianzar su liderazgo. '¿Pero qué capacidad tiene de arbitraje?', se pregunta Pulido.