El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, remarcó el aspecto positivo de los datos del empleo divulgados este viernes que dan cuenta de una tasa de paro que apenas bajó a 8.1%, pero insistió en que debe hacerse más y urgió al Congreso a aprobar medidas de 'sentido común'.
Obama, en pleno año electoral, puso el foco en el hecho de que la tasa de desempleo bajó de 8.2% a 8.1%, y no en el dato que más afecta este viernes a los mercados y que mostró que la economía creó solo 115,000 puestos de trabajo en abril, por debajo de lo esperado.
'Luego de la peor crisis económica desde la Gran Depresión, nuestras empresas crearon más de 4.2 millones de empleos en los últimos 26 meses (y) más de un millón de empleos en los últimos seis meses solamente', dijo Obama en una escuela en el estado de Virginia (oeste).
'Esas son buenas noticias, pero todavía hay mucha gente sin trabajo lo cual significa que tenemos que hacer más', dijo Obama, antes del lanzamiento oficial de su campaña por la reelección el sábado.
'La semana próxima, voy a pedirle al Congreso (...) que tome algunas acciones sobre ideas de sentido común ahora, que puedan acelerar todavía más el crecimiento del empleo', añadió el mandatario.
La tasa oficial de desempleo cayó 0.1 puntos porcentuales respecto de marzo, para establecerse en 8,1%, su nivel más bajo desde enero de 2009, indicó el viernes el nuevo informe mensual sobre empleo del Departamento de Trabajo. Esta caída constituye una sorpresa en la medida en que la mediana de las estimaciones de los analistas indicaba un desempleo estable, en 8.2%.
La cifra de nuevas contrataciones sin embargo, bajó 25.4% con respecto a marzo, y es inferior a la estimación de los analistas (162,000).