BOGOTÁ, COLOMBIA.- La policía de Colombia informó este jueves que suspendió una audiencia de Otoniel, el narcotraficanete más poderoso del país detenido en 2021, al sospechar sobre un supuesto intento de fuga.
Según un comunicado, en “las últimas horas” la policía ordenó “la suspensión temporal” de una audiencia de Otoniel ante la Comisión de la Verdad, un órgano extrajudicial que indaga sobre el conflicto armado, debido a que “de manera irresponsable se hizo pública la descripción exacta del lugar de detención de este individuo”.
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El texto agrega que “fuentes humanas e información de inteligencia recolectada (...) han advertido con solidez acerca de los planes del Clan del Golfo”, el grupo que lideraba Otoniel, “para propiciar” su “liberación”, por lo que tomó esa decisión.
La declaración se da luego de que el periodista Daniel Coronell denunciara en W Radio que supuestamente efectivos policiales vigilan los testimonios que entrega el otrora jefe de la banda narco más grande del país, en los que involucra a miembros de la fuerza publica en varios delitos.
La interrupción de “ninguna manera impide que se retome y que (...) siga rindiendo su versión de manera libre y espontánea ante las instancias que lo requieran”, agrega el comunicado.
En un mensaje en Twitter, el senador izquierdista Gustavo Petro cuestionó la acción policial: “El gobierno no quiere que Otoniel hable. Lo que han hecho (...) es un golpe de Estado. Un acto sedicioso contra la verdad”, escribió el opositor y candidato presidencial.
El gobierno colombiano ha reiterado su intención de que Dairo Antonio Úsuga, su nombre de pila, sea extraditado pronto a Estados Unidos, donde es requerido por narcotráfico.
Hasta su captura cerca a la frontera con Panamá en octubre de 2021, Otoniel encabezó el Clan del Golfo, un poderoso entramado criminal que según las autoridades colombianas exporta al menos 300 toneladas de cocaína anualmente a unos 28 países.
La justicia colombiana también lo requiere por homicidio, terrorismo, reclutamiento de menores y secuestro, entre otros delitos.
En otras ocasiones ha dado su versión ante el tribunal especial nacido del acuerdo de paz de 2016 que contempla penas alternativas para los actores del conflicto que confiesen la verdad y reparen a las víctimas.
El presidente de Colombia, el conservador Iván Duque, presentó su detención como una de las acciones militares más importantes de la historia del país, al nivel del operativo que resultó con la muerte de Pablo Escobar.
El capo permanece recluido bajo estricta vigilancia en Bogotá a la espera de su extradición a Estados Unidos, que ofrecía una recompensa de cinco millones de dólares por su ubicación.
