CARASCAS, VENEZUELA.- Detrás del triunfo de Nicolás Maduro, el cual es considerado como “fraude electoral”, está la mente de Elvis Amoroso, presidente del Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela, conocido por su lealtad al régimen del chavismo.
Tras el conteo de votos en las urnas de los comicios celebrados en horas de la noche en Venezuela, el gane de Maduro dio la continuidad del chavismo y el fin a las esperanzas de miles de venezolanos de poder volver a ver a su familia.
¿Por qué se relaciona a Amoroso con este gane? Su historial controversial por su inclinación al chavismo, salpica el supuesto “robo” presidencial de Maduro hacia Edmundo González.
El triunfo del llamado “hijo de Chávez” con el 51% de los votos, fue bajo la influencia de Amoroso, según cuestionaron algunas autoridades, siendo él parte fundamental para perpetuar la permanencia de la dictadura en el poder de Venezuela.
Edmundo Urrutia González, líder opositor que encabezaba el partido dirigido anteriormente por María Corina Machado, fue criticado por Amoroso, por no haber firmado un compromiso de reconocimiento de resultados, pese a que no es ningún requisito legal ni obligatorio.
“El señor Edmundo González desconoce la Constitución y desconoce las leyes de la República, que son las leyes de todos los venezolanos”, dijo Amoroso en su primer discurso de la jornada.
Su historial
Nacido en Cagua, estado Aragua, el 4 de agosto de 1963, Elvis Eduardo Hidrobo Amoroso, es abogado y economista de profesión.
En la década de 1990, inició su participación en la política venezolana, siendo un militante chavista y cofundador del Movimiento Quinta República, partido político que fue fundado por Hugo Chávez.
En 1993 ingresó al Congreso de Venezuela y fue reelegido en 1998 con el apoyo de las fuerzas chavistas.
Su carrera parlamentaria se extendió hasta 2015, donde el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) respaldó su candidatura, permitiéndole servir como diputado por varios años.
Luego de perder la reelección en 2015, intentó convertirse en magistrado del Tribunal Supremo de Justicia, donde tampoco tuvo éxito.
En octubre de 2018 fue nombrado contralor general por la Asamblea Nacional Constituyente, una institución promovida por el régimen y considerada inconstitucional por la oposición.
Destacó por su rol como controlador, donde inhabilitó a más de 15 dirigentes opositores, incluida María Corina Machado, una de las figuras más visibles de la oposición, de la cual quedó representada por Edmundo Gonzáles.