El Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (Conadeh) señaló que el incremento de casos de extorsión, amenazas, asesinatos, homicidios, despojo de propiedades, trata de personas y el reclutamiento de niños y jóvenes tuvo un fuerte impacto en el desplazamiento forzado de personas que, a juzgar por lo ocurrido en el 2023, va en aumento cada año.
Según el recuento preliminar de las quejas atendidas, en el 2023, el desplazamiento forzado interno es un fenómeno que sigue en crecimiento. De las 10,556 quejas atendidas por el Conadeh, el 13.4% estuvieron relacionados con situaciones de desplazamiento interno.
Las maras y pandillas fueron identificadas, por las víctimas, como los principales agresores en el 30.6% de las quejas relacionadas a desplazamientos forzados. Además, en el 27.8% de los casos, las personas peticionarias identificaron a familiares, pareja, vecinos e incluso al empleador y compañeros de trabajo como los principales agresores de actos de violencia en su contra.
En el 33.4% de los casos, las personas que interpusieron quejas relacionadas a desplazamiento forzado interno indicaron que “desconocían” a sus agresores, ya que las amenazas las recibieron vía telefónica o a través de notas escritas en papel. El 54% de las quejas atendidas por el Conadeh, por desplazamiento forzado, fueron interpuestas por hombres, por causas que ponen sus vidas en situaciones de riesgo, como el tipo de trabajo, ubicación geográfica o relación entre pareja. El 46% restante de las quejas fueron presentadas por las mujeres, por factores de riesgo relacionados a la violencia basada en género, que se manifiesta mediante el abuso sexual y la violencia intrafamiliar, además, del reclutamiento forzado de niños, niñas, adolescentes y jóvenes; la usurpación, despojo o destrucción de viviendas, y la ocupación como amas de casa, comerciantes o vendedoras ambulantes. Las edades de las víctimas oscilan entre los 31 a 59 años en un 64% de los casos, seguidos por los de 18 a 30 años (26%) y adultos mayores (4%).